En caso de impacto, unos esquíes sueltos en el coche alcanzan un peso equivalente a 150 kg

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Tenemos prisa, cogemos nuestro equipo de esquí y nos montamos en el coche sin colocar adecuadamente ni sujetar bien los palos, botas y los propios esquís dentro del habitáculo. En esta ocasión, buena parte de los conductores desconoce que en caso de pacto, a una velocidad de 50 kilómetros hora, estos objetos sueltos o mal colocados salen proyectados multiplicando su masa hasta 50 veces. De hecho, estos esquíes pueden llegar a alcanzar un peso equivalente a 150 Kg.

 

Más datos, un trineo de 4 kg, puede llegar a alcanzar los 120 kg en el momento del pacto y un par de botas llegarían a los 75 kg si el choque se produce a una velocidad de 50 km/h. Así lo demuestra la últa prueba realizada el Real Automóvil Club de España (RACE) dirigida a comprobar la peligrosidad de transtar sueltos en el habitáculo los elementos típicos en los desplazamientos a una estación de esquí, algo propio durante estos meses de invierno.

 

Y es que basta con tener el siguiente dato: circulando a tan sólo 50 km/h, en caso de accidente, los objetos sueltos y mal colocados multiplican su masa hasta 50 veces y sales proyectados ocasionando graves daños a los ocupantes, especialmente cuando, como en el caso de los esquíes, se trata de materiales con aristas cortantes.

 

En la prera prueba de choque se demostró que teniendo la carga colocada y sujeta correctamente no se producen daños. Los esquíes se amarraron firmemente y se utilizó una chapa de madera para proteger la parte posterior del asiento del acompañante. Las botas se colocaron en el suelo y las piezas de equipaje quedaron seguras debajo del trineo amarrado. Como era de esperar, durante el choque en ningún momento los objetos llegaron a soltarse.

 

Carga mal colocada

Foto: RACE

No ocurrió lo mismo en la segunda prueba. En esta ocasión, la carga estaba colocada incorrectamente, no se utilizaron cintas tensoras, se abatieron los dos asientos traseros y los objetos se colocaron libremente en el maletero. Durante el choque los esquíes con bordes cortantes penetraron entre los ocupantes y las botas golpearon contra los asientos. Hay que destacar que cuando el acompañante ya se encuentra realizando el moviento de retorno, las botas de esquiar chocan contra el asiento y lo empujan de nuevo hacia delante. Asismo, una pieza del equipaje rompe el espejo retrovisor y el parabrisas. Igualmente se observa cómo el peso de dichos objetos se multiplica hasta 30 y 50 veces su peso en energía cinética si el pacto se realiza a una velocidad de 50 km/h.

 

Ante las pruebas conseguidas, desde el RACE se han realizado una serie de consejos encaminados a evitar este tipo de accidentes. Entre las recomendaciones se encuentran colocar los objetos voluminosos en una baca cerrada o un ta esquíes, en caso de no poder llevarlos en el maletero; distribuir uniformemente la carga, colocando los objetos de mayor peso directamente sobre la plataforma del interior del vehículo, en la parte inferior y preferiblemente entre los dos ejes; y sujetar bien la carga para evitar que pueda moverse. Asismo, se aconseja llevar cintas tensoras en el coche ante las posibles compras inesperadas y se recomienda no colocar los objetos que superen los 25 kg de peso detrás de las personas. Por últo, se insta a aprovechar los puntos de amarre existentes en el vehículo y a cubrir con una manta las cajas que lleven elementos sueltos o cortantes.

 

 

 

Seguiremos Informando…

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