El control electrónico de estabilidad (ESP o ESC) se ha convertido en uno de los sistemas de seguridad ‘prescindibles’ para nuestro vehículo. Y es que este elemento puede reducir el riesgo de que un conductor se vea plicado en un accidente grave, como consecuencia de una pérdida de control, hasta en un 40%. Según ha dado a conocer el Centro Zaragoza, este sistema ha sido incorado de serie en el 65% de los coches nuevos que se han vendido en España en 2009.
La pérdida de adherencia y, tanto, el derrape del vehículo se puede producir en curvas, maniobras…, este sistema, al detectar las pérdidas de control del vehículo, reduce la potencia del motor y frena selectivamente cada una de las ruedas para mantener la trayectoria deseada él. De hecho, el ESP o ESC figura entre los sistemas de seguridad ‘prescindibles’ de un vehículo, tal y como señala la ‘Guía para comprar un coche seguro’, publicada la Fundación Instituto Tecnológico para la Seguridad del Automóvil (Fitsa).
Pero, ¿de qué manera está presente este sistema en España? Al respecto, Centro Zaragoza, bajo la idea conseguir su plantación de serie en el 100% de los modelos de vehículos a la venta, ha analizado 346 automóviles. Los resultados indican que el control electrónico de estabilidad viene incorado de serie en el 65% de los coches nuevos que se venden en España en 2009. En 2008, la cifra era del 63%. Asismo, se ha dado a conocer que en el 13% no está disponible en toda la gama (aquí no se observa disminución respecto al año pasado).
En este sentido, hay que destacar que el ESP/ESC puede reducir el riesgo de sufrir un accidente grave en un 40%. Además, en el estudio se esta que si en España todos los vehículos equipararan este sistema, se podrían salvar más de 700 vidas y 4.000 heridos graves cada año. Al respecto, desde el Bosch (a prera empresa que ofreció en serie el Programa de Estabilidad Electrónica en 1995) destacan que el precio que puede acarrear su instalación vehículo no supera los 200 euros.
La tancia de este elemento de seguridad es tal que hasta el mismo Euro NCAP ha considerado su obligatoriedad. Desde 2009, el organismo, dentro del endureciento de las pruebas, no entrega las cinco codiciadas estrellas si el vehículo en cuestión no posee este sistema en la mayoría de variantes vendidas.
Recordemos que el Parlamento Europeo aprobaba una nueva norma comunitaria según la cual, todos los coches nuevos e industriales comercializados en la Unión Europea a partir de noviembre de 2011 deberán equipar de serie el control electrónico de estabilidad. Asismo, a partir de 2014 esta medida se ampliará también al resto de vehículos. A pesar de todo, los fabricantes tendrán un plazo de hasta 2018 para algunas excepciones.
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