- Progresa, la filial de revistas de Prisa, ha pedido a sus trabajadores realizar una Asamblea general informativa la tarde ayer. La empresa ha dicho que los puntos a tratar la venta a Liberty no tienen que ver con la actualidad de la compañía.
Nerviosismo en Prisa. Progresa pidió a sus trabajadores realizar una Asamblea informativa que había sido convocada para la tarde de ayer según estipula el Estatuto de los Trabajadores. La idea de los cerca de 120 empleados de Progresa era reunirse para tratar la actualidad del Grupo e intentar explicar la venta de Prisa al grupo estadounidense Liberty. El objetivo de este único punto en la orden del día de la abortada asamblea era intentar calmar los ános, fruto del nerviosismo generado los últos movientos accionariales del Grupo.
La Dirección canceló la reunión minutos antes de que se produjese a las cinco de la tarde y mediante correo electrónico que consideraron que los temas incluidos en la orden del día no tenían que ver con Progresa. El subdirector general de la empresa Agustín Sagredo también explicaba en este correo que la empresa no había dado acuse de recibo de la petición de la Asamblea y que en la Asamblea sólo se pueden tratar asuntos que figuren previamente en el orden del día.
Los trabajadores dicen que la solicitud se realizó el vies la tarde, con mucho más de las 48 horas de antelación que exige la Ley. Indican además que también informaron que a la reunión también acudiría Juan Manuel Gil, miembro del Comité de PressPrint, otro de los puntos que la empresa desconoció este lunes. Progresa agrupa todas las revistas del Grupo como Rolling Stone y Los 40 Principales, además de realizar la revista semanal de los diarios regionales del Grupo y suplementos como ON Madrid que se encarta los vies con El País.
La semana pasada El País realizó una Asamblea General silar en la que acudió el Director del diario Javier Moreno. En el resto de las empresas de Prisa también están pidiendo reuniones para intentar aclarar la compleja situación financiera y los cambios estructurales que se están produciendo, como la segregación de los departamentos de Informática en Indra y la supuesta no intervención de Liberty, el nuevo socio de Prisa. Hace dos semanas los sindicatos del Grupo emitieron un comunicado conjunto expresando su molestia con estas decisiones y han pedido una reunión con la empresa.
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