Es un problema aún sin resolver y que continúa generando polémica dos años después. Las incógnitas comenzaron en julio de 2008 cuando la Audiencia Nacional emitió una sentencia que anulaba el XXIII Convenio colectivo para oficinas de farmacia. Convenio que fue firmado en enero de ese mismo año y en el que no participaron ni la Federación Nacional de Oficinas de Farmacia (FENOFAR), ni la Federación de Trabajadores de Farmacia (FETRAFA). Comenzó aquí un tira y afloja entre las diversas organizaciones que se mantiene hasta la actualidad.
Sin ir más lejos la semana pasada, FENOFAR se mostró satisfecha al volver a ser ratificada como un interlocutor válido dentro de la mesa de negociación del Convenio Colectivo de oficinas de Farmacia parte del Gobierno. Fue a instancias del Diputado de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, en una respuesta parlamentaria sobre si el Gobierno iba a realizar algún tipo de intermediación en el conflicto generado la anulación del convenio colectivo negociado, y que sólo fue firmado la federación empresarial FEFE. El Ejecutivo, afirmó ratificar la sentencia dictada en 2008 la Audiencia Nacional, y expresó su intención de no intervención.
En 2006 nace FENOFAR, integrada empresarios de oficinas de farmacia de Madrid (ADEFARMA), Cataluña (FEFAC) y Cartagena, como una escisión de FEFE. Las tiranteces se intensifican ante la negociación y entrada en vigor del XXIII Convenio Colectivo del sector.
En enero de 2008 se firma el nuevo Convenio parte de Federación Empresarial de Farmacéuticos Españoles (FEFE), Comisiones Obreras (CCOO) y la Coordinadora Estatal de Asociaciones y Federaciones de Auxiliares, Ayudantes y Empleados de Farmacia (CEAFAEF). Será el marzo de ese mismo año cuando un tribunal anule ese convenio, considerando que FETRAFA tenía derecho a participar en la mesa de negociación como un interlocutor válido. Se convocó una nueva mesa de negociación, con FETRAFA incluida, y se firmó el mismo texto.
FEFE presenta un recurso con la pretensión de que se suspenda cautelarmente esa nulidad, y que fue rechazado la
Valoración del RDL 4:2010 parte de FENOFAR
Además, FENOFAR también expresó mediante un comunicado su punto de vista sobre el nuevo RDL 4:2010. La Federación se mostró muy preocupada con las consecuencias que acarreará la aprobación de este Decreto, afirmando que ‘sólo se actúa castigando a quienes más participan en la contención del gasto’ como es el caso de los medicamentos genéricos y los de menor precio. Todo esto llevará a la destrucción de 17.600 puestos de trabajo y de tejido industrial.
Para FENOFAR el Ministerio de Sanidad se ha precipitado con la aprobación de la norma, queriendo reducir la factura sanitaria sin tener en consideración las propuestas del propio sector. Por ello reclaman, que en el plazo existente antes de la convalidación del Decreto en el Congreso, que se retire o al menos sea tramitado como Ley ordinaria para poder incorar propuestas.
Según la Federación los ciudadanos también ser van a ver gravemente perjudicados con el RDL 4:2010, que tendrán que acceder a determinados medicamentos en condiciones muy diferentes a las actuales. También, para la dispensación de ciertos medicamentos tendrán que acudir obligatoriamente a los hospitales, lo que no contarán con la misma accesibilidad al medicamento que ofrecen las oficinas de farmacia hoy en día.
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