El médico y periodista cubano Darsi Ferrer, detenido sin juicio desde julio de 2009, finalizó la protesta que mantenía desde hace tres semanas después de que las autoridades del régen accedieran a sus demandas de reabrir su proceso judicial.
Esta era la tercera ocasión en la que Ferrer, acusado de adquirir ilegalmente dos sacos de cemento y otros materiales, se declaraba en huelga de hambre. En 2006, presentó un informe en el que documentaba el uso de torturas como método de castigo en la isla. Además, ha denunciado insistentemente la situación insalubre de diversos hospitales cubanos y cada 10 de diciembre, Día Mundial de los Derechos Humanos, organizaba marchas pacíficas en La Habana.
Amnistía Internacional lo declaró preso de conciencia a principios de año y en marzo el Departamento de Estado de Estados Unidos le concedió la mención honorífica de Defensor de la Libertad 2009. Ferrer es el segundo disidente que finaliza su huelga de hambre en una semana, después de que el 7 de abril lo hiciera Franklin Pelegrino, activista del ilegalizado Partido Republicano Cubano.
