Tras la llegada a nuestra sección de una extensa y menorizada nota de prensa de la Sociedad Española de Farmacia Comunitaria (SEFAC), Prfarmacia decidió ponerse en contacto con este organismo y realizar una exposición cronológica y detallada de un problema que, según todo apunta, tardará tiempo en resolverse.
Los conflictos relacionados con las condiciones y requisitos para presentarse a los concursos de adjudicación de nuevas oficinas de farmacia no son novedad. Han sido diversos los casos que han acabado en los Tribunales Superiores de Justicia de las diferentes Comunidades Autónomas, con dispersas resoluciones, o en el caso de Asturias en el propio Tribunal de Luxemburgo, cuya sentencia definitiva no se conocerá hasta el próxo 1 de junio. Ahora le toca el turno a Andalucía.
La semana pasada Prfarmacia se hacía eco del anuncio parte de la Consejera de Salud de la Junta de Andalucía, María Jesús Montero, de la convocatoria de un concurso público para la adjudicación de 312 nuevas boticas en la comunidad. Hasta ahí todo parecía normal, pero justo una semana después la Junta Directiva de la SEFAC ha decidido unanidad pugnar la Orden que convoca este concurso y que fue publicado en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía el pasado lunes. En un breve plazo de tiempo presentarán un recurso contenciosoadministrativo ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, y solicitarán la suspensión de la orden como medida cautelar.
La razón de todo este proceso es la equiparación de los farmacéuticos comunitarios con todos aquellos que no son farmacéuticos sanitarios, sin tener en cuenta los años de experiencia directa con los pacientes. Cuando hablamos de farmacéuticos no sanitarios nos estamos refiriendo, ejemplo a inspectores de farmacia, profesores de facultad o técnicos de laboratorios entre otros. Profesionales, en la mayoría de los casos funcionarios, que pueden contar con años de experiencia en su ámbito pero que carecen de ella en la atención de los usuarios de las oficinas de farmacia. Como ejemplo Calle ha querido poner de manifiesto que en el últo concurso de este tipo realizado en Toledo, sólo un adjunto de oficina de farmacia ha conseguido la adjudicación de uno de estos establecientos, mientras que las restantes se han repartido entre estos otros profesionales no sanitarios.
Desde esta Sociedad dejan claro que no están en contra de la concurrencia de estos profesionales, sólo piden una coherencia en el baremo existente, donde se pre la experiencia asistencial como contrapartida, ejemplo a la mayor formación que, factores como horario de trabajo o facilidades, reciben los no sanitarios. ‘No es justo que se puntúe a los farmacéuticos de hospital especialidad, cuando los comunitarios no tienen esa otunidad. Con todas estas normas el futuro de la nueva hornada de boticarios que existe no tendrán las mismas posibilidades de acceder a estas plazas’.
Como conclusión, desde SEFAC reclaman la necesidad de crear un único y equitativo baremo a nivel nacional que termine con todas estas situaciones, ‘No es coherente que las leyes que regulan a las boticas sean muy estrictas que se trata de un estableciento sanitario y, sin embargo, que para la adjudicación de éstas los baremos sean tan volubles’ sentenció el Vocal de SEFAC. Para justificar sus reclamaciones acuden a las competencias que tienen reconocidas cada uno de estos grupos de profesionales farmacéuticos dentro de la Ley 29:2006 de garantías y uso racional de medicamentos y productos sanitarios, la cual justifica que se puntúe más a los comunitarios que al resto su experiencia.
El único caso diferente que existe en nuestro territorio nacional es el de la Comunidad Valenciana, que tras la emisión de una sentencia tuvo que cancelar su concurso de adjudicación de oficinas de farmacia y volver a convocarlo cambiando su baremo de puntuación. Los recursos y sentencias seguirán produciéndose durante las próxas semanas e incluso meses, será entonces cuando quizás pueda arrojarse un poco de luz a todo este asunto.
Seguiremos informando…
