- El aborto libre, el derecho de las menores y la objeción de conciencia son los aspectos más mediáticos de la nueva Ley de Salud Sexual, sobre la que hemos hablado con el presidente de la OMC Juan José Rodríguez Sendín.
Rodríguez Sendín ha dicho de ella que ‘mejora lo previo’ pero que ‘no es perfecta’. Y es que según el representante de los médicos, la nueva normativa deja mucho margen a la interpretación, sobre todo en aquellos casos en los que acuden a interrumpir su embarazo sin el amparo de los padres. ‘Debería dejarse claro qué es madurez y que no lo es’.
Se cumple un cuarto de siglo de la ya modificada ley del aborto que despenalizaba esta práctica en tres supuestos (enfermedad de la madre, problemas de salud del feto o violación). Ahora el aborto es libre hasta las 14 semanas y hasta las 22 se podrá abortar cuando seguir con el proceso suponga ‘un grave riesgo para la vida o la salud de la embarazada’ o si existe ‘riesgo de graves anomalías en el feto’.
También las menores de 16 y 17 años podrán decidir ser o no madres y, aunque deberán hacerlo acompañadas de sus padres o tutores, no necesitarán de su autorización y podrán hacerlo sin que estos lo sepan cuando ello pueda acarrear problemas familiares. Esto deja al médico con la últa palabra y ‘no debe ser el responsable único’ de esta decisión, a pesar de que ser ‘el profesional mejor posicionado para ello’. ‘El error está en dejarlo tan abierto. Se habla del fiscal o de un psicólogo, pero no sé quién sería mejor‘.
Sobre la objeción de conciencia de los profesionales sanitarios en el caso de la decisión sobre las menores que quieran abortar sin sus padres, Rodríguez Sendín aclaró que no da lugar puesto que ‘el médico que se enfrenta a esta situación ya aceptó practicar abortos‘. Para el resto de profesionales y para todas las prácticas susceptibles de objeción, el presidente de la OMC pide una ley que regule con carácter general esta práctica.