Durante estos días, la Dirección General de Tráfico realiza una intensa campaña de control de autobuses. Documentación, tacógrafo y cinturón de seguridad son los principales elementos a vigilar los agentes. Al respecto, el sector, a través de su asociación Asintra, ha manifestado su apoyo.
Con motivo de los viajes de verano, Tráfico realiza hasta el 25 de julio una campaña de control y vigilancia de autobuses. Y es que es uno de los medios de transte más utilizado para realizar estos desplazamientos de largo recorrido. Por este motivo, los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil controlarán más de 4.000 autobuses. Entre los elementos que serán inspeccionados hay que destacar la documentación reglamentaria, el tacógrafo, las condiciones técnicas del vehículo y se les realizarán controles de alcoholemia.
Otro de los elementos en los que se hará mayor hincapié es el uso del cinturón de seguridad, obligatorio para todos los autobuses que se matriculen desde octubre de 2007. El conductor y los usuarios de este medio de transte están obligados a llevar el cinturón correctamente abrochado, si el vehículo dispone de dicho sistema de seguridad, tanto si se circula vías urbanas como interurbanas. De hecho, no llevarlo abrochado es una infracción grave que lleva aparejada una sanción de 200 euros. Aquí, la responsabilidad económica de dicha denuncia es del ocupante del autocar.
Ante esta campaña, la Federación Española Empresarial de Transte de Viajeros (Asintra) ha mostrado su apoyo. De hecho, asegura que desde 2002 están informando sobre el uso obligatorio de los cinturones de seguridad en los autobuses que lo lleven instalando, así como sobre todas las medidas de seguridad con las que están dotados los autobuses.
