Fue en 2006 cuando los productos sanitarios se quedaron sin desarrollo legislativo. En ese momento los laboratorios y comunidades autónomas llegaron a un acuerdo el que se acordaban descuentos con las farmacias. Sin embargo el problema llegó cuando el Ministerio de sanidad plantó una reducción para los pañales del 20%. Las CCAA quieren mantener sus conciertos con las farmacias y éstas piden a los laboratorios que asuman ese 20%, que obviamente no van a hacer.
Esta situación ha originado que las oficinas de farmacia dejen de comprar los pañales y los stocks se estén agotando. Y en principio, esta medida no debería haber afectado a los fabricantes de absorbentes, ya que el objetivo del Ministerio era consolidar en la factura unos descuentos que las farmacias ya venían aplicando con los Ejecutivos regionales.
Sanidad ya se ha dado cuenta del error y espera a que se acaben las vacaciones para estudiar una nueva vía. Eso si Trinidad Jénez no está demasiado liada con las prarias madrileñas.
Seguiremos informando.
