TV Cubana: ¿Los primeros serán los últimos?

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La televisión cubana acaba de cumplir sesenta años. Su prera señal salió al aire el 24 de octubre de 1950 desde La Habana. En 1958, existían 25 transmisores de televisión en todo el país y el servicio estaba organizado en tres cadenas nacionales: CMQ Televisión, Unión Radio Televisión y Telemundo.

 

Sin embargo, la llegada de Fidel Castro todo lo cambió en 1959. La cifra de canales se redujo a dos, y así permaneció hasta 2002. La intervención estatal finiquitó el proceso de innovación y liderazgo.

 

El passe en la televisión en colores fue un ejemplo desgraciado. Cuba fue el prer país latinoamericano y el segundo del mundo en disfrutarla, según datos de la Organización de Estados Iberoamericanos; sin embargo, después de su exitoso lanzamiento entre los años 1958 y 1959, la técnica no pudo desarrollarse integralmente hasta 1975. En 1980 todavía algunos programas se emitían en blanco y negro.

 

La calidad de formatos, programas, transmisiones, decorados y demás aspectos técnicoartísticos ni siquiera puede compararse con la de otros países del entorno.

 

Los spatizantes del castrismo consideran positivo que Cuba haya salido ilesa del pacto de la “telebasura”. Es cierto que la férrea censura y el control gubernamental han pedido la introducción de formatos internacionales de entreteniento, pero la pracía de la inmundicia la detenta el surrealismo de sus informativos.

 

En materia televisiva, Cuba se ha (auto)aislado de las tendencias contemáneas. La política vertical del régen usurpa actualmente el espacio natural del debate artístico y académico. Es ello que desde los años 60 el nivel de calidad ha caído tanto, que nunca más la Isla ha servido de referente latinoamericano e internacional en ningún otro aspecto de la televisión, como sí lo fue entre 1950 y 1959. Ver para creer.

 

Aclaremos que el embargo de Estados Unidos no tiene ninguna responsabilidad en el descalabro, que el único bloqueo sobre las ideas, los conceptos y el talento los ejerce el régen de La Habana contra los creadores.

 

Michel Suárez

Periodista

 


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