Las enfermedades coronarias afectan seriamente al corazón y toman ese nombre que pueden obstruir las arterias coronarias que llevan la sangre oxigenada al músculo cardiaco. Si la arteria se tapona y la sangre no llega al miocardio o corazón aparece la patología coronaria: angina de pecho, infarto o muerte súbita. La causa principal es la arterioesclerosis o placa de ateroma que se va formando con el paso de los años en el interior de las arterias hasta llegar a ocluirlas. El progresivo envejeciento de la población, así como el llevar un estilo de vida no saludable (obesidad, sedentarismo, tabaquismo…) son dos de las principales causas.
Gracias a los avances en los últos veinte años de la llamada cardiología intervencionista, que permite navegar los vasos sanguíneos con un catéter y llegar a las coronarias para desobstruirlas mediante la colocación de una pequeña estructura denominada stent, se han salvados muchas vidas sin necesidad de cirugía abierta y evitando así todos los riesgos de este tipo de operación quirúrgica convencional.
La prestigiosa revista científica Journal of the American College of Cardiology demuestra mediante los resultados de un estudio realizado investigadores del Hospital Clínico San Carlos de Madrid, que son más eficaces y seguros los stents fármacoactivos o liberadores de fármacos que los que anteriores, que no poseían esta cualidad.
El estudio español, liderado los cardiólogos Javier Escaned y Humberto Colmenares, constata que estos stents son mucho mejores para evitar nuevas estenosis u obstrucciones coronarias. Nuestras felicitaciones a todo el equipo del Hospital Clínico San Carlos, en cuya investigación también han participado el Instituto Cardiovascular y la Unidad de Metodología de Investigación y Epidemiología Clínica del Servicio de Medicina Preventiva.
Mayka Sánchez
