- La nueva Prisa, con Liberty al mando y Fernando Abril en la gestión, no cuenta con Ignacio Polanco. El heredero del perio de Don Jesús y actualmente Presidente del Grupo no tiene sitio ni manteniendo un cargo honorífico.
Ignacio Polanco sólo seguirá en Prisa hasta que Juan Luis Cebrián se mantenga al mando, una salida que se podría producir este mismo año. Liberty no quiere tener nada que ver con la antigua gestión y eso ha forzado la retirada de la vieja guardia, lo que incluye a Ignacio Polanco y todos sus cargos representativos. El caso es que desde que en julio de 2007 heredase el grupo tras fallecer su padre Jesús de Polanco, Ignacio no ha hecho más que ceder poder dentro de la empresa. Y siempre a favor de Cebrián.
En noviembre de 2006 fue designado vicepresidente, puesto que ocupó hasta su nombramiento como presidente en julio de 2007. Durante este tiempo mantuvo cierto control de la compañía, hasta que en diciembre de 2008 se hacía oficial su ‘abdicación’ como heredero del perio. En ese momento, Cebrián se hacia con el control y comenzaba una de las épocas más complejas de la compañía. Renegociaciones de deuda y operaciones a muchas bandas para conseguir socios capitalistas, marcaron estos dos últos años. Hasta que llegó Liberty.
Respecto de la llegada de este partner, Cebrián se ha cansado de decir que la gestión seguiría estando en manos de la familia Polanco, aunque la últa decisión de recortar 2.500 puestos de trabajo contradice totalmente esta supuesta ‘libertad’ para controlar el Grupo. En concreto, el fondo Liberty ni se ha disuelto en pequeñas participaciones, ni quiere dejar de controlar Prisa. Es lógico, los gestores deben velar el dinero de sus miembros y para ello han metido las tijeras para hacer rentable sus inversiones.
Precisamente el nombramiento de Fernando AbrilMartorell como nuevo director general financiero no sólo ha significado el relevo de Cebrián, sino que también abre paso a una nueva era en el Grupo en la que la Familia Polanco no tiene nada que hacer. Los históricos inversores del Grupo ya dejaron la empresa tras el últo cambio del Consejo de Administración y ahora es el turno de los últos representantes de la familia. La salida de Ignacio Polanco es clave y una señal hacia los inversores de que la vieja guardia deja paso a un grupo de gestores técnicos y que cuentan con la confianza de los mercados y los bancos.
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