Un asesino anda suelto en la escena internacional . Ha ametrallado a más de doscientos de sus conciudanos que se manifestaban las calles exigiendo elecciones libres. Su nombre es Muamar al Gadafi un hijo de beduinos, los Quaddafa, nacido en el desierto libio, que desde 1969 se mantiene en el poder tras derrocar al monarca Idris y ponerse al frente de una falsa revolución que el mismo dirige desde entonces. Son ya cuarenta y dos años de dictadura, que pretende perpetuar a través de sus numerosos hijos y, sobre todo, ahogando en sangre las revueltas populares. Reagan, que tenía su misma visión del mundo, le envió dos misiles en 1986 para matarlo y acabar con un régen despótico y terrorista. No lo consiguió y este coronel continua dejándonos a todos perplejos y horrorizas con sus hazañas. Esta vez, ni sus doscientas amazonas, vírgenes y guerreras, le van a salvar del desprecio internacional que ojalá consiga acabar con sus desmanes de los que estamos francamente hartos.
Manuel Fernando González
Editor y Director
