Caso Malaya: 30 días después

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 Si, el juicio el caso Malaya todavía continúa. Más bien renquea en los juzgados de Málaga, a 3 sesiones semana y con una media de 4 horas de declaraciones. La Justica, se lo toma con tranquilidad.

 

GORKA ZAMARREÑO (ENVIADO ESPECIAL A MÁLAGA) Aunque esperemos que no tanto como en el Caso Ballena Blanca, donde se anunció a bombo y platillo la putación de una treintena de presuntos corruptos y todo quedó en agua de borrajas. Todo un rayo de esperanza para los encausados en el caso Malaya. La legión de abogados defensores sigue enrocada en sus intentos de dar al traste con las escuchasy los registros. Eminentes catedráticos de derecho que cobran minutas millonarias toman notas, se afanan en los interrogatorios. Durante el mes de marzo (y ya hemos entrado en el sépto mes de causa) han ido pasando el estrado acusados y los policías que se ocuparon de los registros, el análisis del material y la incautación de ejemplodos millones de euros del ala en el coche de uno de los acusados.

 

 

Los agentes de la Ley tuvieron que andar con pies de plomo para evitar los dispositivos de contravigilancia que Jae Hachuel,jefe de seguridad de Roca, había establecido.Las instituciones del Estado y en este caso, la policía están tan infiltradas topos que los inspectores al cargo de la investigación sólo rendían cuentas ante el juez Torres. El premio a tanto celo fue el traslado de ambos agentes a una Comisaría de barrio (a la del Palo –Málaga, para más ironía), tras aparecer en las pesquisasnombres muy incómodos que nunca fueron putados.

 

Sin embargo el saqueo viene de lejos, los miembros de la UDEF (Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal) tienen constancia de operaciones que beneficiaban a Roca desde 1993, pero eso no toca.


Toca y esperamos ansiosos las declaraciones de alcaldes y concejales presuntamente corruptos, los Capos de Aifos y sus esbirrosa sueldo, esos que no saben comerse los marrones pero disfrutan amenazando periodistas. A buen seguro que nos divertiremos con sus rocambolescas historias, sus miserias y sus aires de grandeza. No se olviden, va para largo, la Justicia es así, lenta e incluso, a veces, inexorable.

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