04/05/2011 PRLATAM 115.942 SUSCRIPTORES La Escuela de Negocio INSEAD y el Centro de Desarrollo de la OCDE, con el apoyo de Fundación Telefónica, han realizado el estudio InnovaLatino, del que se desprende que la innovación es clave para el desarrollo del continente. En la presentación, diferentes ponentes han expuesto sus experiencias innovadoras.
El estudio ‘InnovaLatino: Impulsando la innovación en Latinoamérica’ se basa en una encuesta realizada a 1.500 fabricantes de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, México, Perú, y Uruguay. En él se muestra cómo la innovación puede ayudar a la región en el creciento económico, en el aumento de su productividad y comercio, y en el bienestar de su población. Latam presenta, según el informe, un retraso en términos de innovación respecto de los países de la OCDE y de las naciones asiáticas emergentes. De esta manera, Latinoamérica invierte un 0,3% de su PIB en este rubro, frente al 2,3% de media de los países de la OCDE.
El director del Centro de Desarrollo de la OCDE, Mario Pezzini, manifestó que Latam ‘ha tomado grandes pasos en innovación en las políticas públicas, que incluyen la mejora de la gestión macroeconómica, políticas de reducción de la pobreza, al igual que en el sector privado, con el desarrollo de nuevos modelos de negocio’, aunque recalcó que ‘falta un sistema integrado de protección social para la clase media creciente’, así como ‘una reforma fiscal’ que aumente la recaudación pública. ‘Los gobiernos aún tienen que invertir más, y mejor, en la innovación para aumentar la productividad, y competir en mercados globales’, añadió Pezzini, quien apuntó que un empresario es ‘alguien que no duerme las noches para crear’ y que ‘innova como respira’. Pezzini hizo también referencia a los avances en innovación que se están dando en el sector público de diferentes países, como en Chile con la creación del Consejo de Innovación o Argentina con la del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva, aunque señaló que Brasil es el más avanzado en este sentido.
Soumitra Dutta, del eLab de INSEAD recordó que ‘el término innovación era innovador hace algunos años’ y expuso que ‘la innovación no sólo es I+D en laboratorios’, sino que ‘la innovación es vida; la innovación somos nosotros’, lo que ‘hay que usarla como herramienta para inspirar a la gente joven’, ya que ‘tiene gran tancia en dar esperanzas’ a la población. Entre las conclusiones del estudio, Soumitra Dutta destacó que ‘en Latinoamérica está teniendo lugar mucha innovación’. Las recomendaciones de InnovaLatino apuntan hacia la inversión en educación; el aprovechamiento de la fuerza económica de la región, que cuenta con gran cantidad de materias pras y recursos naturales; y emplear sistemas de información para dar seguiento y asesorar políticas de innovación.
El director de Telefónica Latinoamérica, Javier Santiso, insistió en la idea de que Latinoamérica ‘tiene una otunidad única’ esta década que no puede dejar escapar. ‘Los países de la OCDE están situando sus centros de I+D en países emergentes’ lo que ‘la innovación va a proceder cada vez más de países emergentes’, dijo Santiso. ‘Veremos en los próxos años empresas tecnológicas latinoamericanas entre las mejores del mundo’, añadió.
Experiencias innovadoras en Latam
Bajo el nombre ‘Los protagonistas del proceso de innovación’, expertos de Brasil, Chile y México expusieron sus experiencias a los presentes. Rafael Rangel, rector del Sistema Tecnológico de Monterrey (México) presentó su proyecto de universidad virtual y consideró que hay que ‘cambiar los modelos de innovación’. ‘La Universidad tradicional prepara egresados y hace investigaciones que envía a la sociedad sin saber si van a servir para transformarla, para mejorarla, o no. No hay retroalentación. Se necesita un cambio de paradigma’, dijo y añadió que la Universidad tiene que ‘tomar las riendas y volverse el centro de desarrollo’. ‘No podemos en Latinoamérica –recalcó estar cambiando de gobierno cada seis años, dejando que deshagan todo lo establecido el gobierno anterior; tenemos que dar continuidad’. Rangel explicó también que la Universidad de Monterrey es la que más patentes solicita al año en México y que su consolidación ha sido posible gracias a las comunidades que les ayudaron a montar los diferentes campus. Por últo, Rangel habló de los Centros Comunitarios de Aprendizaje, establecidos en lugares abandonados y que son ‘la puerta al mundo’ de sus pobladores.
Silares a estos Centros Comunitarios de Aprendizaje son las Escuelas de Informática y Ciudadanía creadas Rodrigo Baggio en Brasil y basadas en la autogerencia y autosustentabilidad, y con la misión de formar agentes de transformación. Esta iniciativa, basada en el poder que las tecnologías pueden tener en el desarrollo de las sociedades, se ha extendido a otros países del mundo. Baggio, presidente del Comité para la Democratización de la Informática en el país carioca, afirmó que ‘los emprendedores sociales son un campo innovador’ y que ‘es posible ganar dinero ayudando a la comunidad y cambiando la realidad de los países’.
Raúl Rivera, presidente de la Fundación ForoInnovación de Chile, aseguró que en Latam ‘no tenemos más opción que volveros innovadores si queremos ser desarrollados. La otra opción es repetir los errores de otros. Y eso no sólo es tonto, sino que también es caro’. Rivera comentó que la región es muy creativa no sólo en aspectos artísticos, sino también en los ámbitos industrial y empresarial con compañías como Cemex, Embraer, Falabella, Natura, etc. ‘Latinoamérica –señaló tiene que ser una región faro que es la más rica del mundo de los pobres; la más desarrollada del mundo emergente’.
Otro innovador, aunque no latinoamericano, es Ferrán Adriá, encargado de la conferencia inaugural del evento en la que explicó la creatividad que le ha llevado a convertirse en uno de los mejores chef del mundo y las decisiones innovadoras, y a veces arriesgadas, que han transformado El Bulli de restaurante a Centro de Creatividad en 2010, aun suponiendo una reducción en los beneficios. Para Adriá ‘la creatividad es una forma de entender la vida; no es un trabajo’, eso ahora ha creado, junto con Telefónica, El Bulli Foundation, un think tank para la divulgación de la creatividad culinaria a través de intet. ‘Esto es una revolución social –sentenció el chef que nunca nadie regala su creatividad. ¿Os figuráis que Norman Foster hiciera lo mismo? ¿que Madonna hiciera lo mismo? Cambiaría el mundo’. ‘Tenemos que pedir a la gente que comparta creatividad. Ya hay muchos que donan dinero. A mí no me vale el dinero; quiero compromiso’, dijo y añadió: ‘no tengo ninguna necesidad de ser multillonario’. ‘Otro tema –continuó Adriá es el del ego. Hay que explicar a los chavales que no aspiren a ser número uno que eso es muy difícil; sólo unos pocos lo consiguen’. ‘Vivos en una sociedad en la que sólo valen los ranking, los números uno. Si eres el número dos ya has fracasado. Hay que crear para ser feliz; si luego llegas a ser el número uno, mejor’.
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