UNA ISLA PERDIDA EN EL MAR. Turismo virtual cubano

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La ciencia y la técnica avanzan a pasos agigantados en todo el mundo, pero en ningún lugar como en Cuba. La celebración del VI Congreso del Partido Comunista de Cuba así lo demuestra. Ahora resulta que una de las más de 300 proposiciones de cambios en la economía de la isla es ‘estudiar una política que facilite a los cubanos residentes en el país viajar al extranjero’. Nada nuevo bajo el sol. Años atrás ya se había planteado lo mismo, cuando Carlos Aldana era el ideológico del Comité Central del Partido, pero jamás esto se puso en práctica, pues Aldana fue defenestrado y elinado del grupo de poder y el proyecto se engavetó que no estaba en los Lineamientos Políticos del Partido Comunista de Cuba, único permitido en la isla.

 

El Socialismo Tropical Cubano tiene la vida y los movientos de todos los ciudadanos que residen en la isla bajo un ferréo control. Siempre hay un ojo que te ve. Nadie puede salir o entrar al territorio nacional sin el visto bueno del régen entiéndase PVE, o lo que es lo mismo, permiso para viajar al extranjero, conocido popularmente como tarjeta blanca, la cual otorga la Dirección de Inmigración y Extranjería del Ministerio del Interior, la cual tiene un valor de 150 dólares. A esto hay que agregar otros 100 dólares que cuesta obtener el pasate, más el valor del billete de avión ida y vuelta que exige el gobierno cubano hacia el lugar de destino.

 

Salvo la cúpula gobernante que tiene acceso a los fondos públicos hasta para los más exquisitos caprichos humanos, dentro de Cuba son pocas las personas que pueden disponer de una cantidad silar en dólares para hacer turismo. El salario promedio de cualquier profesional es de unos 20 dólares mensuales, con los que tiene que maniobrar y sacar cuentas para poder comer, vestirse y mal subsistir.

 

Pero la aplicación de tal medida beneficiaría a los gobernantes cubanos, prero al lograr con ella un éxodo seguro y controlado al mandar al exilio forzoso a buena parte de los ciudadanos descontentos y contrarios al sistema de gobierno perante en la isla. En segundo aspecto, buenos rendientos económicos, al incrementarse las remesas que llegan del extranjero, para pagar la salida de Cuba de sus familiares y amigos.

 

Es una de las posibilidades de matar dos pájaros de un tiro, como dice el refrán, pero que cabe dentro del marco de las probabilidades, mientras tanto el régen ya inventó el turismo virtual mental cubano. Algo digno de estudio. Nada, cosas del desarrollo del Socialismo Tropical Cubano.

 

Una isla perdida en el mar

JULIO CÉSAR GÁLVEZ

Periodista

Exprisionero de conciencia cubano del Grupo de los 75

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