Las claves de la dimisión de Vargas en Vocento

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Lo contamos en prnoticias hace quince días: su marcha era cuestión de días, los necesarios para cerrar un acuerdo amistoso para abandonar el Grupo. La nota de prensa remitida Vocento indica que la renuncia fue presentada ayer ante el Consejo de Administración de Vocento. Las labores de coordinación del equipo directivo serán asumidas el presidente de la compañía, Diego del Alcázar, quien de momento sigue al frente del Grupo. Iñaki Arechabaleta se prepara para sucederle.

 

 

El ahora ex Consejero Delegado de Vocento ha durado poco más de tres años en el cargo con un balance muy negativo para el Grupo. Su salida se ha precipitado, no tanto su errática gestión, sino que errores de bulto que colmaron la paciencia de las familias que componen el Consejo de Administración. El prero de ellos fue la salida de José Luis Sainz hacia Prisa con toda la información sensible de la compañía, sin que nadie se lo pidiese y la sencilla razón de que Vargas no le obligó a firmar una cláusula para irse a empresas de la competencia.

 

El segundo gran error de Vargas fue pensar que tenía inmunidad y que sus apoyos dentro del Consejo eran vitalicios. El ex Consejero Delegado actuó habitualmente como si fuese el dueño de la compañía, haciendo y deshaciendo estrategias, que nadie le advirtió que eran erradas. Es más, desde el Consejo ya se venía comentando hace al menos un año que Vargas seguía en la empresa exclusivamente que las familias no se ponían de acuerdo para buscarle un sustituto.

 

Y así se gestó su salida: dos semanas de negociaciones después de que la decisión del Consejo de pedirle la renuncia estuviese tomada. Intensos días en que Vargas en más de una ocasión abandonó los despachos de Luca de Tena visiblemente enfadado. Las informaciones llegadas hasta prnoticias indican que comenzó pidiendo cinco millones de euros de indemnización equivalente a cinco sueldos anuales según su escala salarial, aunque quienes han estado presentes en las negociaciones indican que no se le pagó más de los tres millones que cobró Belarmino García hace tres años. Ello, a cambio de que en el comunicado enviado a los medios, constara que Vargas renunciaba voluntariamente a la empresa ‘ motivos personales’.

 

En la nota oficial de Vocento se indican qu e ‘la estrategia puesta en marcha durante el periodo de gestión de José Manuel Vargas, ha permitido, a pesar de la difícil coyuntura, mantener la posición de liderazgo en el mercado español, tanto en lo referente a la difusión y audiencia, como a la rentabilidad. Al mismo tiempo, se ha acometido el cambio del ‘mix’ de ingresos –intet y audiovisual suponen ya más del 25% del total manteniendo la sólida posición financiera de la compañía, claro diferencial de Vocento respecto a otros grupos del sector’.

 

Esta visión edulcorada de la realidad nada tiene que ver sin embargo con la visión que los principales accionistas tienen de su gestión.  La peor salida a Bolsa desde 2006 las acciones se lanzaron a 15 euros y las deja a 3,4 euros; ABC ha perdido durante su mandato la friolera de 121,8 millones de euros; la Prensa regional el corazón de la compañía padece una arritmia galopante y ya son mayoría las que pierden dinero; la TDT nacional (la 10) ha fracasado, con un irrisorio 0,4% de cuota de pantalla y unas pérdidas de casi cinco millones de euros en apenas tres meses tras su lanzamiento en septiembre de 2010.

 

Por su parte, Punto Radio queda con un EBITDA negativo de 4,3 millones y tres veces menos de oyentes que la COPE y la cuarta parte que Onda Cero. El gratuito Qué!, se mantiene con un resultado negativo de tres millones de euros. Tampoco hay dividendo y la deuda financiera, que era prácticamente inexistente en 2008, ya supera los 120 millones de euros. En Intet tampoco han acertado con la compra de 11870 o finanzas.com, sin influencia alguna en los sectores de ocio y financiero, respectivamente.

 

¿Y ahora? Interinamente se queda Diego del Alcázar, otro que se ha salvado de la quema a pesar de las informaciones que apuntaban insistentemente a su salida. Respecto de su sucesor, el mejor colocado es Iñaki Arechabaleta si es que el Consejo aprueba la propuesta de un grupo tante de accionistas del Grupo. Arechabaleta es uno de los pocos hombres cuya gestión no genera anticuerpos en algunas de las familias de Vocento, principalmente que lleva desde el año 1994 ocupando cargos directivos en medios del Grupo y ha sobrevivido a integración del Grupo Correo con ABC y a tres mandatos de consejeros delegados una vez consolidada Vocento: José María Bergareche, Belarmino García y José Manuel Vargas.


Seguiremos Informando…


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