La Asociación Catalana de Radio (ACR) ha trasladado al Parlamento la necesidad de crear condiciones para preservar la pluralidad informativa en Cataluña. Para ello pide entre otras cosas que se normalice la situación de excepcionalidad que vive la radio pública catalana, que tiene doble financiación, teniendo en cuenta que la radio privada en catalán supera en más de dos millones de oyentes a la pública.
La Asociación Catalana de Radio explica que la mayoría de las radios públicas no han tenido nunca publicidad o la están supriendo para evitar la competencia desleal con el sector privado, tal y como recomienda la Comisión Europea.
En Cataluña se vive una situación de excepcionalidad. La defensa del catalán ha sido el principal argumento para justificar esta doble financiación de las radios públicas, que reciben ingresos tanto publicidad como subvenciones. Según un informe de la ACR de octubre de 2011 Catalunya Radio habría recibido desde que comenzó la crisis 138 millones en subvenciones. En 2010 recibió 37 millones de la Generalitat, a lo que habría que sumar la publicidad. COM Radio recibió el año pasado 10 millones de euros entre Ayuntamiento y Diputación. A esto hay que añadir los 4 millones que suponen para los Ayuntamientos tener más de 240 radios municipales.
Además, según el últo informe de la ACR que se basa en los resultados del últo año móvil del EGM, la radio privada en lengua catalana supera en 2.040.000 oyentes a la pública, sumando el conjunto de las privadas 2.870.000 oyentes y las públicas 827.000. Teniendo en cuenta solo a las radios generalistas, la oferta privada supera a la pública en un 55%. Según el EGM 916.000 oyentes eligieron la radio privada frente a los 586.000 que se decantaron la pública.
La privada más escuchada es Rac 1, con 582.000 oyentes de febrero a noviembre de 2011. Le sigue Cadena Ser con 149.000, Ona FM con 78.000, Onda Cero con 63.000 y Cope con 44.000. En cuanto a las públicas, Catalunya Radio registró 514.000 oyentes, Com Radio 52.000 y Radio 4 20.000.
El informe suma tanto los oyentes de las emisoras que emiten íntegramente en catalán, como los oyentes de las franjas de programación en lengua catalana que lo hacen el castellano.
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