Desde el prer momento diste pasos cortos y pequeños, pero también borrosos.
No logro enfocarte ni situarte con claridad, tampoco la masa social puede hacerlo.
Llevas dos meses en mi vida, pero tampoco ha sido tiempo suficiente para que cambies.
Te agrando y es peor, pero tampoco mejora la cosa si te achico.
¿Qué hago contigo?
¿Te ha confundido tanta S en tu nueva nomenclatura?
¿Necesitas un oftalmólogo?, ¿Un ‘chute’ de pixeles?, ¿O un buen Photoshop?
Espero tu pronta respuesta.
Los murciélagos nunca duermen….