‘El Partido Popular no sabe comunicar’. La frase se viene escuchando desde los tiempos de José María Aznar y responde a la posibilidad de los populares para vender su gestión en el Gobierno. En cien días el equipo de Mariano Rajoy sigue acusando muchos de estos errores históricos.
Cien días del Gobierno de Mariano Rajoy que sirven de excusa para hacer balance en los puntos fundamentales de su Gobierno. En lo que nos compete, la Comunicación, está claro que las cosas no marchan de la mejor manera. El Partido Popular lleva gobernando tres meses con buena parte de la opinión pública en contra y luchando contras las presiones económicas de Bruselas, todo en medio de un cla de rechazo de buena parte de sus medidas.
El Ejecutivo ha realizado duros ajustes en estos cien días, pero no ha sabido explicar a la población los beneficios a largo plazo de los mismos. En medio de este camino ha perdido la supuesta mayoría absoluta de las elecciones andaluzas que daban las encuestas, nuevamente culpa de los recortes. En esta negativa percepción hacia el Ejecutivo hay mucho de contexto externo, de malos resultados económicos, pero también hay déficit en el manejo de la Comunicación.
La principal encargada de dar las malas noticias parece ser la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría, pero a pesar de sus esfuerzos, sus políticas no terminan de convencer. Sus comparecencias sólo se reducen a la rueda de prensa, un buen ejemplo de un Gobierno –al menos en sus altos cargos que no está la labor de Comunicar ni de comparecer regularmente ante los medios de Comunicación.
Tampoco hay una coordinación muy clara. Soraya habla en el Consejo de Ministros, mientras que el resto de representantes del Ejecutivo van libre. Unos hablan en el Congreso, otros en seminarios y los ministros económicos se han aficionado a dar entrevistas a periódicos económicos anglosajones, pero todos sin aparente relación entre sus mensajes.
Pero no es lo único. Quizás uno de sus principales errores ha sido mantener en suspense la renovación del tón en los medios públicos. Hace un mes Alfonso Ussía dio en el clavo calificando al PP como ‘muy tontísos’ sus erradas políticas de Comunicación que ya desde los tiempos de Aznar vienen cosechando. En su columna diaria de La Razón, el periodista criticaba la pasividad del PP ante el control de los medios públicos que sigue teniendo el PSOE tres meses después de perder las elecciones.
‘En los medios de comunicación públicos, en Radio Nacional y Televisión Española con acentuado protagonismo, el PSOE sigue en el Poder y el PP es un ridículo partido de la oposición que no merece consideración alguna. La estupidez o la altanería de los Populares en la comunicación social les ha llevado a renunciar, no sólo a la exigencia del equilibrio informativo, sino a la aceptación de la humillación constante’, decía Ussía con dureza al tiempo que recordaba que el PSOE tardó tres días en hacerse con el control de la tele pública después de ganar las elecciones en 2004.
Y es que es cuando menos extraño que el PP siga criticando constantemente a los informativos de TVE falta de pluralidad, y no haga nada intentar cambiar los equilibrios de poder a pesar de tener mayoría absoluta en el Congreso de los Diputados para forzar estas modificaciones.
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