Madrid se erige durante dos días como la capital de la felicidad con la celebración del II Congreso Internacional sobre la Felicidad que organiza el Instituto CocaCola de la Felicidad, esta vez, bajo el lema ‘La felicidad es más si se comparte’.
Durante la prera jornada se puso de relieve la tancia de la comunicación como elemento fundamental para sentirnos felices. ‘No estamos aquí para hablar de productos sino de emoción’, confesaba Carlos Chaguaceda, el presidente del Instituto de la Felicidad.
‘Felicidad’ es, sin duda, la palabra mágica del Congreso aunque lo cierto es que durante la prera jornada todos los ponentes coincidieron en la dificultad de definir un concepto que todo el mundo conoce pero que nadie encuentra las palabras exactas para referirse a ella. Entre las ideas que se propusieron, el escritor y divulgador científico Eduardo Punset habló de la felicidad como la ausencia del miedo, el paleontólogo Juan Luis Arsuaga diferenció la felicidad del placer, el catedrático de la universidad complutense Carmelo Vázquez prefirió hablar de felicidades en lugar de felicidad y de las dificultades para medir un concepto que no está bien definido, el científico de la universidad de Harvard Mario Alonso Puig diferenció la felicidad del bienestar subjetivo.
El congreso continúa hoy martes con las ponencias del monje budista Matthieu Ricard; del fundador de la Organización de la Organización Mundial de Transplantes, Rafael Matesanz; de la monja de clausura sor Lucía Caram; del fundador de la ONG “Sonrisas de Bombay”, Jaume Sanllorente; del periodista José María Íñigo; de la oncóloga infantil Blanca López Ibor; del filósofo Javier Sádaba; de la directora del colegio Méjico, Almudena Armijo; y del doctor en Psicología y escritor Javier Urra.
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