La tercera edición de Perdidos en la tribu, que se estrena este miércoles, ‘es la más dura y a la vez la más divertida’ según palabras de Manuel Villanueva, director de contenidos de Mediaset que define a los participantes como ‘unos personajazos’. Esta vez los miembros de las tribus, que son ‘más cañeras’, tendrán más protagonismo que en otras ediciones. La poligamia en una de las tribus, una jerarquía excesivamente definida en otra, y condiciones que pondrán a los concursantes al límite, hacen que las experiencias sean más intensas que en otros años, lo que esta vez no participarán menores.
En algunas de las tribus ‘son muy sexuales’, decía Pablo Abelenda, director del programa, que ha explicado cómo ejemplo los miembros de los Tamberma sentían curiosidad saber cómo era el pene de los blancos y que en la tribu de los Suri se practica la poligamia, lo que ‘el sexo se respira en el ambiente’. Sin embargo, asegura que en el programa prefieren ‘sugerir que mostrar’. ‘Somos sensibles con la sensibilidad del espectador’ explicaba.
En cuanto a las familias, darán mucho que hablar, según Abelenda, quien ya vaticina que Juan Carlos, el padre de la familia Berhanyer, ‘es ca de trending topic’.
El programa se ha rodado durante 25 días en Togo, en el Amazonas y en Etiopía y consta de 10 capítulos. Desde Mediaset, Manuel Villanueva espera que ‘haya partido de vuelta’ y abre la posibilidad de ver a las tribus en España. Aunque ya en esta tercera edición se han metido algunos elementos de Perdidos en la ciudad, ejemplo se ha dado a probar a las tribus comida española.
Raquel Sánchez Silva será la presentadora de esta nueva entrega, sustituyendo a Nuria Roca. La periodista asegura que hay momentos en que ha ‘llorado de la risa’ y otros en los que se ha llegado a emocionar al ver lo que han pasado las familias.
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