Las preras referencias históricas a métodos para tratar la hemofilia se remontan a principios del siglo XX. Desde entonces hasta la actualidad, y gracias a la investigación y los avances científicos, los tratamientos para esta patología han evolucionado significativamente. En línea con estos avances, Pfizer y el Hospital Universitario La Paz, conscientes de la tancia de dar respuesta a las necesidades de los pacientes hemofílicos continúan apostando la innovación en el tratamiento de esta enfermedad. “Indudablemente, la mejora en la calidad y seguridad de los tratamientos así como el conociento de la enfermedad parte de los especialistas han repercutido de forma significativa en la mejora de la calidad de vida de los pacientes” señala Carlos KIett, Presidente de la Asociación de Hemofilia de la Comunidad de Madrid (Ashemadrid),
El Hospital La Paz se posiciona como referente a nivel nacional en el tratamiento de los trastornos de coagulación de la sangre. Cada año tratan entre 500 y 600 pacientes hemofílicos y son atendidos un equipo específico compuesto 3 hematólogos y 15 profesionales de enfermería. De tal modo que estas patologías suponen cerca del 40 ciento del gasto en medicamentos del Hospital: “Gracias al esfuerzo de los profesionales y a su dedicación vocacional nos hemos convertido en un centro de referencia nacional en el tratamiento de la hemofilia y hemos incorado a nuestra cartera de servicios los últos avances de diagnóstico y tratamiento” afirma el doctor Rafael PérezSantamarina, Director Gerente del Hospital Universitario La Paz.
Debido a que la hemofilia es una enfermedad caracterizada hemorragias espontáneas o prolongadas, estos pacientes presentan muchas complicaciones a la hora de tener que enfrentarse a una cirugía o tener que realizar cualquier actividad que conlleve un riesgo de sangrado. Por ello y tal y como declara Carlos KIett, “una atención integral que responda adecuadamente a todas las necesidades de los pacientes debería incluir algunos elementos complementarios como nutricionista, dentista y fisioterapeutas que, junto con equipos habituales como hematólogos, personal de enfermería, psicólogos, rehabilitadores y traumatólogos, formen un equipo multidisciplinar completo”. No obstante, “hoy en día existe una atención integral respecto a las necesidades de la patología” concluye el Presidente de Ashemadrid.
El Hospital La Paz involucra múltiples especialidades en el tratamiento de estos pacientes tal y como señala el doctor PérezSantamarina “ofrecemos una atención integral a través de la sección de hemofilia, el Hospital de Día, el Servicio de Farmacia y otros especialistas como traumatólogos o rehabilitadores. Además hacemos un diagnóstico genotípico y fenotípico de la enfermedad y últamente hemos plantado un servicio de dispensación de factores individualizado”. Todo ello ha posicionado al Hospital La Paz como centro de referencia en el tratamiento de la hemofilia. “Esto se debe al esfuerzo que venos realizando desde hace más de 30 años un grupo de profesionales comprometidos y entusiastas” añade el doctor Víctor Jénez Yuste, jefe de sección del Servicio de Hematología y Hemoterapia del Hospital La Paz.
Como muestra de su compromiso con las personas que padecen esta enfermedad, Pfizer va más allá de la investigación y colabora con estos pacientes mediante programas de asistencia y apoyo a diferentes asociaciones médicas y de pacientes. Asismo, la compañía biomédica se ha convertido en la única compañía que ofrece terapias recombinantes de últa generación para el tratamiento de la hemofilia A y B. “Nuestro compromiso está orientado a identificar las necesidades de los pacientes para ofrecer nuevas soluciones, tanto a los profesionales médicos como a las personas que padecen la enfermedad” declara la doctora Isabel FernándezArias, Responsable Médico del Área de Hemofilia de la Unidad de Atención Especializada de Pfizer.
Un ejemplo del compromiso de Pfizer mejorar la calidad de vida de los pacientes con hemofilia es la reciente autorización de la Agencia Europea del Medicamento a una variación en las condiciones de conservación del medicamento de la compañía indicado para el tratamiento de la hemofilia B, pasando a ser de hasta dos años a temperatura ambiente (entre 2º y 30ºC). Hasta este momento era necesario que estuviera refrigerado entre 2 y 8ºC. Este nuevo avance en el almacenamiento y conservación ofrece una mayor libertad y flexibilidad para los pacientes. También, se está trabajando en un nuevo dispositivo que facilitaría la administración del Factor VIII reduciendo los pasos de infusión para los pacientes con hemofilia A. Además, Pfizer cuenta con la planta biotecnológica ubicada en San Sebastián de los Reyes que es la única planta en el mundo que elabora y distribuye productos recombinantes para el tratamiento de la hemofilia A y B. Más del 95% de la producción total de la planta se destina a la extación y sus productos se distribuyen en más de 40 países de todo el mundo.
