La fuerte crisis de publicidad y las abultadas pérdidas de los diarios generalistas les ha obligado a buscar sinergias para reducir costes fijos, lo único que pueden recortar después de haber dejado en mínos sus plantillas. En septiembre los editores afinarán las propuestas con el objetivo de unificar departamentos de Publicidad, de Distribución y de Impresión. Es la últa salida antes de que empiecen a desaparecer cabeceras.
En septiembre los grandes editores de la prensa tienen varias citas marcadas en rojo. Luis Enríquez, consejero delegado de Vocento –que ya se reunió con Mauricio Casals de La Razón tiene pendiente encuentros con su homólogo de Unidad Editorial Antonio Fernández Galiano y con José Luis Sainz actual responsable de El País. El objetivo no es otro que comenzar a cerrar los proyectos de fusión que tienen en sus carpetas. De momento, no hablamos de fusiones de cabeceras, pero si de integraciones totales de costes.
Esto significa que en la práctica los grandes grupos Vocento, Unidad Editorial y en menor medida Prisa y Planeta quieren migrar hacia centrales únicas que den un servicio unificado a todos sus periódicos. Hace unos meses Galiano advertía a prnoticias que era necesario que los grupos se replanteasen costes y compartieran sinergias y desde hace semanas que en Vocento tantean a todos los principales diarios para intentar llegar a acuerdos.
La prera área que podría unificarse sería la de la Distribución, donde los grupos tienen elevados costes y actualmente no poseen recursos propios comprometidos. El objetivo es negociar con proveedores de este servicio de manera unificada, bajo una misma firma y de esa manera reducir esta factura con mayor poder de presión.
En Impresión se daría un segundo paso, ya que actualmente la mayoría de los diarios tienen este servicio subcontratado mediante pequeñas participaciones en empresas que en el pasado fueron propias. En este sentido, si se unifica la presión de todas las cabeceras en determinados puntos geográficos se pueden ahorrar costes, no sólo a la hora de realizar la producción de diarios, sino que también al momento de negociar con los proveedores del papel.
En el caso de la Publicidad estamos hablando del departamento más sensible, que es la única de las áreas de producción –excluyendo contenidos que todavía está integrada dentro de las mismas empresas. Fusionar estas áreas significaría cerrar al menos tres centrales de medios propias, con el evidente coste laboral que esto significa. No obstante, la crítica situación obliga a realizar estos planteamientos, única salida antes de tener que cerrar cabeceras.
Estas sinergias son claves para entender el futuro de la prensa que sólo este año ha visto como sus ingresos de publicidad han caído una media del 20% frente al desplome del 10% en los ingresos venta de ejemplares. Hablamos nada menos que del 75% de todos los costes del diario. Los estudios indican que antes de que comenzara la crisis los mayores costes son industriales: 25%35% para el papel y la presión y otro 30%40% para la distribución. De esta manera, los menores costes son en gastos editoriales –de entre el 18%25% y de gastos de administración y g de entre un 10%15%.
Viendo estos datos no es difícil darse cuenta de que los diarios yo no tienen margen para seguir despidiendo plantilla, en mínos y con el personal prescindible para seguir sacando a la calle el periódico. Diferente esta la situación de las empleados que sí deberán salir de departamentos de publicidad, prentas o distribuidoras producto de estas sinergias. Acuerdos que necesariamente plicarían el cierre de muchas empresas que prestan servicios a los grandes grupos de manera separada.
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