Por un lado, está la CNC que, ante la decisión del Gobierno de unir a todos los órganos de defensa de la competencia en un solo órgano regulador, y sabedores del poco tiempo que les queda, están dispuestos a dar guerra hasta el final, como ya hicieran con la fusión reciente de dos medios audiovisuales.
Del otro, el Consejo Audiovisual de Cataluña (CAC) tiene la potestad de dar y quitar licencias como ya, en 2008, hizo al retirar las licencias a la COPE y no parecen estar dispuestos a permitir que esta cadena, entrando la puerta de atrás, vuelva a tener voz en Cataluña.
Y, mientras, la redacción sigue trabajando con la incertidumbre de saber qué pasará el próxo mes con su futuro profesional.
Seguiremos informando…