Cómo norma general la época estival tiende a ser un momento del año, junto con la Navidad, en la que los buenos hábitos nutricionales tienden a relajarse. “En los meses previos al verano se observa mayor sensibilidad para adoptar medidas preventivas o terapéuticas encaminadas a tratar el exceso de peso”, explica el doctor Javier Salvador, presidente de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN). Sin embargo, una vez inmersos en las vacaciones, esta actitud queda aparcada, cuando según el experto, ‘sería ópto aprovechar los meses de verano para iniciar un cambio en los hábitos nutricionales y de estilo de vida que permita retomar un camino de salud para el resto del año’.
El 10% de la población infantil Europea es obesa, es decir, 15 millones de niños. Existen algunas publicaciones llevadas a cabo sobre población en edad escolar que sugieren que en el período estival se pueden producir mayores aumentos de peso y masa grasa respecto al período académico. En el verano, coincidiendo con las vacaciones, algunos niños y adolescentes ingieren mayor cantidad de calorías a expensas de alentos de alta densidad energética como la “comida basura”, dulces o bebidas gaseosas calóricas. “Esta actitud provoca que se adquiera un esquema de alentación desordenado basado en la ingesta de múltiples tomas y a horas muy distintas, incluyendo horas nocturnas que pueden llegar a alterar los patrones del sueño, lo que no siempre va acompañado de un incremento en la actividad física”, alerta este experto. Sin embargo, hay excepciones y muchos niños y adolescentes consiguen mejorar su composición y su peso coral en el periodo vacacional ya que “se les permite realizar más actividad física y realizar una alentación más ligera, rica en verduras y frutas y no tanto en alentos con alto contenido en grasas”.
“En cómo se alenten sus hijos tienen un papel fundamental los padres”, afirma el doctor Salvador. “En el período estival la convivencia familiar puede hacerse más frecuente y, tanto, el pacto de la educación nutricional en ese ámbito sigue siendo extremadamente tante y añade muchos niños itan lo que han visto y vivido en su familia, lo que su salud nutricional se ve influida de forma prioritaria el ambiente doméstico”.
“No hay alentos prohibidos o inadecuados, sino la ingesta incorrecta en frecuencia y cantidad de algunos de ellos lo que genera el problema del sobrepeso”, asegura el doctor Salvador. “No hay problema si uno se excede en la ingesta de verduras, pero sí si lo hace de forma continuada en la de alentos con alta densidad energética, como dulces, helados, bebidas hipercalóricas, embutidos o alentos ricos en grasas anales”, asegura. “Los alentos ricos en fibra, las hortalizas, verduras, frutas, pescados o cas blancas son más aconsejables, especialmente si se estos se cocinan de manera que no se añada más contenido calórico: a la plancha o al va, poner algunos ejemplos”.
En la actualidad, la obesidad afecta a 150 millones de adultos en Europa, lo que supone un 20% de la población adulta. En España, se esta que más de la mitad de la población adulta tiene problemas de sobrepeso y que el 3035% tiene obesidad abdominal. En cuanto a la obesidad mórbida, se esta que se da en el 23 % de la población, pero si consideramos a todas las personas con obesidad grave que presentan IMC > 35, las tasas son de entre el 710 %, con una mayor representatividad en la zona sur (Extremadura, Andalucía, Albacete, Murcia), Galicia y Canarias.
Elinar esos kilos de más pasado el verano
Los alentos ricos en carbohidratos de absorción rápida y aquellos ricos en grasas, especialmente de origen anal, son los que más promueven el aumento de peso y grasa coral, lo que es necesario prescindir de este tipo de alentos en su justa medida, lo que no quiere decir elinarnos completo de la dieta. “Plantearse llevar a cabo una dieta drástica es poco inteligente que atenta contra la salud y no necesariamente mejora la situación de sobrepeso y obesidad. Hay que huir de la realización de dietas excesivamente hipocalóricas y carentes en uno o varios grupos de alentos que puede hacer que uno pierda peso precisamente del compartento que ha de mantenerse como la masa muscular, ósea o del agua del organismo”, asegura el doctor.
Especialmente sensibles a este tipo de dietas son aquellas personas con patologías asociadas como diabetes, hipertensión, trastornos hepáticos, renales o hiperuricemia, entre otros, ya que una alentación inadecuada “puede tener repercusiones muy serias”. Es este motivo, explica el doctor Salvador, el cual “si existen dudas sobre el tipo de alentación que uno debe hacer, y especialmente si existe algún tipo de enfermedad asociada, es conveniente consultar a los profesionales sanitarios especialistas en este terreno para obtener una información rigurosa y un consejo eficaz y seguro para su salud”.
En este sentido, según la Organización Mundial de la Salud (OMS) se prevé que para el 2015 un total de 41 millones de personas fallecerán en el mundo de enfermedades crónicas a consecuencia de una alentación inadecuada, consumo de tabaco y falta de actividad física. Se prevé, asismo, que la obesidad será la prera causa de mortalidad y morbilidad en este siglo.
Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición
La Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN) es una sociedad científica compuesta Endocrinólogos, Bioquímicos, Biólogos y otros especialistas que trabajan en el campo de la Endocrinología, Nutrición y Metabolismo, para profundizar en su conociento y difundirlo.
En la actualidad, la SEEN está formada 1.800 miembros, todos ellos plicados en el estudio de las hormonas, el metabolismo y la nutrición. Está reconocida como una Sociedad Científica de referencia en estas áreas temáticas entre cuyos objetivos se encuentra la generación de nuevos conocientos y su traslado a la atención clínica que conlleve mejoras en el diagnóstico y el tratamiento de todos aquellos pacientes con enfermedades endocrinológicas y/o nutricionales.