¿Cuáles están siendo las claves de la industria farmacéutica innovadora en el entorno cambiante que experenta España? Pedro Ballesteros, BU Head de Global Established Products en Pfizer España, propone entender lo que está pasando, asumirlo y buscar una otunidad. Para esto últo, señala que la clave es ‘la propia gente’.
En la sesión ‘Farma y Biotech en la encrucijada: nuevos modelos para un entorno cambiante’, organizada Antiguos Alumnos del IE Bsuiness School y moderada Luís Truchado, Director de EuroGalenus Executive Search, Pedro Ballesteros ha planteado una serie de cuestiones obligadas: ¿Por qué a igualdad de precio la marca tiene que estar penalizada frente al genérico? ¿Qué gana la Administración si el precio es el mismo? Pero sobre, todo, ¿qué gana el paciente?
Este experto, que concentra el conociento de haber sido el responsable del negocio postpatente de dicha compañía desde el año 2009, ha explicado que, siendo el precio del innovador y del genérico el mismo, al serle dispensado el innovador, el paciente no tendrá que ver cómo ‘cada mes que va a la farmacia a su genérico le están cambiando la marca del genérico’.
Sin embargo, lamenta que hoy en día está tan arraigado que el genérico está más barato que la marca, ‘que tendríamos que gastar millones para cambiarlo’. Señala que solo a través de una gran campaña de Comunicación y de un ‘tratamiento más agresivo a la hora de comunicar al paciente lo que está pasando’ parte de los medios de comunicación, se puede conseguir que éste tome decisiones frente a su prescriptor.
¿Por qué no se hace? Pedro Ballesteros es muy rotundo: ‘Al Gobierno no le interesa eso y a nosotros nos da un miedo cerril ir en contra del Gobierno’. Desvela que ‘el año pasado Farmaindustria decidió que íbamos a hacer una campaña, incluso se puso dinero sobre la mesa para intentar hacerlo, y luego cambió el Gobierno’.
También alude a la situación de médicos y farmacéuticos: ‘Aunque el nuestro cliente principal sigue siendo el médico. ¿Sería este capaz de, con el principio activo, con la receta electrónica, y con la presión de las autonomías, seguir poniendo las marcas? ¿Y el farmacéutico, recibiendo la presión que recibe de nuestros competidores los genéricos, sería capaz de seguir manteniendo las marcas?
Así, la única otunidad de la industria innovadora está en que ‘cada una de las personas encuentre la forma de convencer al paciente del valor añadido que sigue dando la innovación aunque los productos tengan 25 o 30 años en el mercado’, indica. Concluye: ‘En este negocio, la innovación es la propia gente’
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