La mitad de los casos de infertilidad en la pareja se deben a causas masculinas

Tambre_RocioNuez
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Se calcula que aproxadamente un 17% de las parejas tendrán dificultades reproductivas y de ellas el 50% debido a factores masculinos. Las alteraciones seminales pueden favorecer o explicar dicha dificultad reproductiva, el 30% de forma aislada y el 20% asociadas a factores femeninos concomitantes ‘Un 15% de la parejas estériles se catalogan como de ‘causa desconocida’, lo que algunas de ellas pueden enmascarar déficits masculinos no diagnosticados, lo que vemos que el factor masculino alcanza un relevante protagonismo en la esterilidad conyugal’, indica la Dra. Rocío Núñez, subdirectora de la Clínica Tambre.

 

Tres décadas llevan los profesionales de la Clínica Tambre analizando las funciones sexuales y reproductivas de los varones, lo que son expertos en estudiar y tratar la infertilidad masculina.

 

El análisis de semen o seminograma, es la prueba básica que se realiza a un varón en estudio de esterilidad. Esta prueba incluye el número de espermatozoides, su movilidad y su morfología. Sin embargo, se esta que el 15% de los varones estériles presentan un seminograma normal pero pueden ser infértiles.

 

En términos generales, el 50% de los casos de infertilidad en la pareja son debidas a causas masculinas, las cuales pueden ser azoospermia (ausencia de espermatozoides en el semen del varón); oligozoospermia (pocos espermatozoides); astenozoospermia (baja movilidad de los espermatozoides) y teratozoospermia (alto centaje de espermatozoides). En algunos casos, puede que el varón incluso no sea capaz de eyacular (aspermia) o que se produzca una eyaculación retrógrada, que consiste en que el semen con los espermatozoides “refluye” hacia la vejiga, no existiendo eyaculación tras el orgasmo. Otros factores tantes son la presencia de anticuerpos antiesperma o infecciones. También cabe la posibilidad de que tanto el número como la movilidad y la morfología de los espermatozoides sean normales, pero éstos no sean capaces de fecundar motivos que muchas veces se desconocen.

 

El tratamiento excelencia en el caso del factor masculino si es muy severo es la Microinyección intracitoplasmática o ICSI. Con esta técnica solo se necesita un espermatozoide móvil cada óvulo para introducirlo y conseguir un embrión. Si la alteración de los espermatozoides es genética, entonces habría que recurrir al Diagnóstico Genético Preplantacional (DGP). En este caso, también se introduce un espermatozoide en cada óvulo, pero posteriormente se analizan los embriones para poder transferir el que no tenga la alteración cromosómica analizada.

 

Es necesario llevar a cabo estudios previos completos de la capacidad reproductora del varón y de la mujer previos al tratamiento de reproducción asistida. De este modo, se puede conocer el verdadero potencial de ambos y sus posibilidades. Sólo con estos estudios puede determinarse qué técnica es más adecuada para cada pareja y, en consecuencia se reduce el tiempo y el coste económico de los procesos.

 

La casuística que afecta a la esterilidad es extensa y cada día nuestro modelo de hábitos sociales parece que incrementa la probabilidad de verse afectado un la posibilidad de concebir. Contaminantes ambientales, obesidad, consumo de algunas sustancias, anomalías congénitas, tabaquismo, etc. son algunas de las causas de la infertilidad masculina.

 

 

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