Lo han presentado en el marco de la Cumbre Empresarial HispanoPortuguesa celebrada estos días en la localidad lusa de Vidago.
FARMAINDUSTRIA y su homóloga tuguesa, Apifarma, han presentado hoy, en forma de una declaración conjunta, las Estrategias Integrales para el Impulso de la Industria Farmacéutica compatible con la sostenibilidad de los Sistemas Nacionales de Salud. Esta presentación se ha hecho pública en el marco de la Cumbre Empresarial HispanoPortuguesa que se han celebrado los días 3 y 4 de junio en la localidad tuguesa de Vidago.
Esta declaración conjunta, llevada a cabo las Asociaciones nacionales de la industria farmacéutica de España y Portugal, tiene como objetivo poner en valor al sector farmacéutico como un aliado de los sistemas sanitarios públicos y de las sociedades modernas, resaltando su tancia estratégica para el futuro. La industria presente en ambos países es fuente de empleo cualificado, estable y de alta productividad, muy competitivo en mercados exteriores y líder en I+D.
El documento destaca que los ajustes presupuestarios que han vivido ambos países desde 2010 han pactado de forma dramática en el sector farmacéutico con reducciones del gasto farmacéutico público hasta niveles de hace más de 10 años. No obstante, tanto FARMAINDUSTRIA como Apifarma consideran que es el momento preciso para que se desarrolle una estrategia conjunta que garantice los tres pilares básicos sobre los que se sustenta un sistema de salud desarrollado y evolucionado.
En prer lugar, se reclama un marco económico y regulatorio estable y predecible a medio y largo plazo, que permita la fijación de objetivos de evolución del gasto farmacéutico público para un horizonte temal de al menos tres años, alineados con los crecientos del PIB, y con medidas de control del gasto farmacéutico respetuosas con la innovación y alineadas con las de la UE.
En segundo lugar, el documento demanda procionar un trato adecuado de las innovaciones en términos de precio y acceso al mercado. De forma específica, deben establecerse procedientos de evaluación de nuevos fármacos ágiles, independientes y transparentes, que valoren la dinámica del proceso innovador, así como la asignación de precios en función de lo que ata cada fármaco.
Por últo, se insiste en que es necesario un mercado vertebrado y sin fragmentación regulatoria, en el que exista una definición nítida del reparto de competencias y un ejercicio escrupuloso de las asignadas a cada Administración (central y autonómica); de forma inmediata, deben anularse las medidas regionales que reinterpretan localmente las condiciones de acceso de los nuevos medicamentos aprobadas el Gobierno central.
Esta declaración conjunta de FARMAINDUSTRIA y Apifarma finaliza recordando que, el potencial económico que tiene, el sector farmacéutico puede ser un activo tante para consolidar la recuperación económica de España y Portugal, pues es de los pocos sectores que reúnen las tres palancas esenciales de la economía moderna: producción, investigación e internacionalización.
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