Mariano Rajoy logra controlar a (casi) todos los medios de Comunicación en sus tres años en Moncloa

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Mariano Rajoy celebraba esta semana tres años en La Moncloa, un periodo con un balance agridulce en el que el Presidente de Gobierno ha despreciado a los medios de Comunicación. En este periodo ha ofrecido contadas ruedas de prensa y entrevistas, no ha pedido el cierre de nueve canales de TDT y ha mirado pasible como la Prensa y la Radio se han hundido la crisis de la publicidad. Por el contrario, su único desvelo ha sido intentar controlar a la Prensa para evitar críticas y para ello no ha reparado en forzar destituciones de directores de periódicos, vetar programas en las televisiones y reforzar el control de RTVE.

 

 

‘Mariano Rajoy no quiere ningún tipo de relación con los medios, no le tan ni les necesita’. El diagnóstico de reputados expertos en Comunicación y popes de la prensa no fue errado cuando el líder del PP llegó a Moncloa el 20 de noviembre de 2011. Tres años después, parece que nada cambia y el desinterés los medios sigue siendo evidente. Tres cursos en que han pasado muchas cosas, la mayoría contrarias a los intereses de la Prensa, Radio y Televisión, y que en gran medida de han producido la desidia del equipo de Gobierno liderado Rajoy, pero secundado Soraya Sáenz de Santamaría, Carmen Martínez Castro y Pedro Arriola.

 

El mandato de Mariano Rajoy comenzaba con indecisiones en el nombramiento de la cúpula de RTVE, paralizada desde la renuncia de Alberto Oliart y que finalmente desembocó en la llegada de Leopoldo González Echenique y de Julio Somoano en los Informativos, un duro para ejercer el control de los Telediarios y ayudar al Ejecutivo con sus reformas y recortes que comenzarían a ponerse en marcha semanas después.

 

Somoano fracasó y fue reemplazado hace pocas semanas José Antonio Álvarez Gundín quien viene a reforzar aún más si cabe el control de Moncloa sobre los Telediarios. En época electoral es clave tener a los medios públicos controlados y así se lo ha hecho saber el equipo de confianza de Rajoy a la nueva cúpula. En estos momentos el balance de RTVE es penoso: la cadena no tiene dinero, la audiencia ha caído en picado y los Informativos han dejado de ser referente. Lo peor es que se sigue dudando de su modelo de financiación y el Grupo Popular ya ha pedido la vuelta de la publicidad.

 

Precisamente el sector audiovisual ha sido de los más perjudicados Rajoy durante su mandato con duros efectos económicos tantes tras el cierre de nueve de sus canales. Hace más de un año decidía ejecutar la sentencia del Tribunal Supremo para cerrar nueve canales de TDT defectos de forma en la concesión de los mismos en la época de José Luis Rodríguez Zapatero.

 

Las cadenas alegaron que un decreto administrativo podría haberles salvado e pedido el cierre –que finalmente se produjo este mes de mayo pero Moncloa se negó. Antes del verano puso en marcha la reordenación del espectro financiando la reantenización de la población. Lo últo que hemos sabido es que faltan piezas para las antenas y que en teoría se realizará un nuevo concurso con nuevas licencias a partir del próxo año.

 

¿Y la prensa? Desde el prer momento de su llegada a Moncloa, Mariano Rajoy demostró que no le interesaba gobernar apoyándose en los medios ni en la opinión pública. Sin ruedas de prensa abiertas ni entrevistas ha optado un control directo de los diarios más críticos. Desde finales del año pasado hasta comienzos de éste coincidieron el cese del director de ‘La Vanguardia’, José Antich; de ‘El Mundo’ Pedro J. Ramírez y de El País Javier Moreno. Los más críticos y en especial Pedro J. Ramírez han denunciado presiones de Moncloa y el interés de Mariano Rajoy de querer tener controlados a todos los medios de Comunicación. Hace unas semanas ‘El País’ inauguraba su edición en catalán y ‘El Mundo’ celebraba su 25 aniversario con sendos brindis con cava con la vicepresidente de Gobierno Soraya Sáenz de Santamaría. El pacto estaba sellado.

 

Las televisiones también han sufrido las presiones de Moncloa. Telecinco decidía apostar la vuelta de la política hace unos meses apadrinados el Gobierno. El objetivo era contrarrestar el tirón de la Sexta y sus programas que semanalmente vapulen al Ejecutivo. Incluso se ha llegado a comentar que desde el Gobierno que se vetan tertulianos como el líder de ‘Podemos’ Pablo Iglesias o el propio Pedro J. Ramírez, anunciado como colaborador en ‘Un tiempo nuevo‘, pero cinco semanas después todavía no aparece en el espacio.

 

Para nadie es un misterio las constantes llamadas de Moncloa para intentar influir en los contenidos de las teles y en cómo se utilizó como arma arrojadiza el cierre de los nueve canales de TDT y la posterior decisión de sacar nuevas licencias a concurso. Finalmente las críticas se han apaciguado y podrían suavizarse en campaña electoral. ¿Las Radios? Constantemente se ha criticado la derechización sufrida la Cadena Ser en el últo año y muchos la atribuyen al pacto tácito cerrado el presidente de Prisa Juan Luis Cebrián con Moncloa. Un triste balance.

 

Seguiremos Informando…

 

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