Más del 41,3% de la población española es sedentaria según el últo estudio del Instituto Nacional de Estadística. Y precisamente la falta de ejercicio y actividad física es uno de los factores que explican la prevalencia de la obesidad y el sobrepeso, y no tanto el exceso de ingesta de energía. Esta es la principal conclusión del estudio científico ANIBES, (Antropometría, Ingesta y Balance Energético en España) que ha evaluado prera vez la ingesta y gasto energético de macronutrientes, los datos antropométricos, los patrones de actividad física y el comtamiento alentario de la población.
La Fundación Española de la Nutrición (FEN), en colaboración con un comité científico de expertos, ha elaborado este estudio pionero que analiza el balance energético y sus determinantes. Destaca entre sus conclusiones que la dieta de los españoles es de unas 1.800 kcal, menos de lo recomendado la Autoridad Europea de Seguridad Alentaria (EFSA). Tan solo el grupo de niños y niñas entre 9 y 12 años tiene una ingesta de energía media acorde con lo recomendado para su edad (2.078 kcal/día en niños y 1.973 kcal/día en niñas). Pero realmente la preocupación de los expertos radica en que a menos calorías, se ingieren menos nutrientes prescindibles para estar sanos. En este sentido, el Prof. Gregorio VarelaMoreiras, presidente de la FEN y catedrático de Nutrición y Bromatología de la Universidad CEU San Pablo de Madrid, alerta que ‘los niveles actuales de ingesta de energía no se pueden reducir más sin poner en riesgo la ingesta en cantidad suficiente de algunos nutrientes, especialmente de las vitaminas y minerales, lo que debemos modificar las estrategias de forma que aumente el gasto energético en lugar de disminuir la ingesta de energía’.
Además de suspender en la cantidad, los españoles también suspenden en la calidad de la dieta. Y es que el estudio refleja un perfil calórico desequilibrado. Es decir, que se consumen muchas grasas y proteínas y pocos hidratos de carbono. De hecho la EFSA recomienda que entre el 45 y el 60% de los nutrientes totales ingeridos sean hidratos pero la realidad sitúa el centaje en un 41,5% de media.
Como novedad, se ha estudiado la energía que atan los alentos y bebidas divididos en 16 grupos y 29 subgrupos para conocer con precisión la contribución real de cada uno de ellos a la energía total de la dieta. Respecto a esto, el Prof. Gregorio VarelaMoreiras, presidente de la FEN y catedrático de Nutrición y Bromatología de la Universidad CEU San Pablo de Madrid, ha explicado que ‘conocer con exactitud los hábitos alentarios y de actividad física reales de la población permitirá establecer en el futuro recomendaciones, así como guías alentarias y de hábitos y estilos de vida más ajustados a la realidad, y tanto, más eficaces en la prevención del sobrepeso y la obesidad’.
Otro gran valor del estudio Anibes es el uso de las nuevas tecnologías, como móviles y software de últa generación. Su utilización ha permitido recopilar, registrar y analizar los datos en tiempo real. A esto se une que prera vez se ha interrelacionado varios aspectos del estilo de vida: balance nutricional, balance energético, y balance hídrico. Tres aspectos fundamentales para cuidar nuestra salud, donde el consumo de líquidos es prescindible para mantener un estado de hidratación ópto, especialmente en la práctica de actividad y ejercicio físicos y en épocas de calor.
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