A menudo nos quejamos de los astronómicos sueldos que cobran los futbolistas u otros personajes con proyección pública. Pero después de saber que la persona encargada de la Comunicación del Colegio de Médicos de Madrid acabará el mes con 12.000 euros mensuales en su cuenta, seguro que incluso galácticos como Cristiano Ronaldo se plantean cambiar de profesión. Bromas aparte, la cantidad presupuestada para la que muchos han calificado como ‘desinformación’ del Colegio de Médicos ha levantado ampollas entre los médicos que pagan sus cuotas a esta institución.
Tras la constitución en septiembre de 2012 de la actual Junta Directiva del Colegio de Médicos de Madrid (ICOMEM) comenzó una devastadora tormenta que no solo se ha llevado delante a miembros de la Junta Directiva y de departamentos como el de Comunicación. La falta de honradez de algunos compromisarios ha tumbado pilares que para estas institución deberían ser intocables: la transparencia, la ética y el honor.
Debido a la intensa tensión que vive desde hace años este organismo, actualmente solo quedan ocho miembros en la Junta Directiva. Fueron ellos quienes, a espaldas de la presidenta Sonia López Arribas, decidieron cesar de su cargo a José García, la persona que se responsabilizó de las labores de dirección y coordinación de la estrategia de Comunicación y Relaciones Institucionales de la coración médica desde noviembre de 2012. El propio ICOMEM reconoció que se trataba de un despido procedente.
Fuentes cercanas al Colegio aseguraron aquel entonces a prsalud que a algunos miembros les irritaba que en este conflicto José García mantuviese una postura neutral, afín a los estatutos y, tanto, asesorando a la presidenta. ‘No se doblegaba a determinadas manipulaciones’, comunicaron. Sin embargo, oficialmente los motivos del despido que contó con el ‘no conforme’ de Sonia López fueron ‘la necesidad de externalización para disminuir costes’. Cabe decir que José García cobraba un sueldo bruto de 40.000 euros anuales.
Y así fue. A falta de la firma de la presidenta y pese a la polémica en el sector, el ICOMEM convocó un concurso público para seleccionar agencia de Comunicación. Se presentaron 22 ofertas y resultó elegida Portocarrero & Asociados, de Felipe Portocarrero, unos honorarios de 120.000 euros anuales. Comparen y juzguen ustedes mismos. La propia Sonia López Arribas denunció la ilegalidad de esta convocatoria, pero no fue suficiente para que cundiese el pánico en la agencia de Comunicación elegida.
Fue la prera denuncia, pero no la últa. Desde que Portocarrero & Asociados asumiera las riendas de la Comunicación del Colegio en marzo de 2014, la agencia ha sufrido un aluvión de críticas la ‘nefasta’ gestión de las redes sociales, la publicación de publiretajes camuflados de noticias, mantener información obsoleta y disfuncional en la web, etc.
Sin embargo, parece que algunos miembros de la Junta Directiva están especialmente conformes con la labor desempeñada la agencia de Felipe Portocarrero. O al menos eso se puede intuir al ver que en el apartado 5 de los gastos presupuestados para el nuevo ejercicio aparece que la agencia cobrara una jugosa cantidad de, nada más y nada menos, 144.000 euros anuales. Serán 12.000 euros mensuales en ¿Comunicación?
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