España es un destino privilegiado. Nuestro país cuenta con un servicio de salud reconocido a nivel mundial, muy competitivo, con una buena relación calidad precio, con instalaciones de máximo nivel y con un sector turístico muy desarrollado. Estas características han hecho que las previsiones de recepción de turistas sanitarios sean bastante optimistas, llegando incluso a los 100 millones de euros de cara a los dos próximos años. Sin embargo, todavía hay muchos aspectos que se deben pulir.
En España, hay grupos hospitalarios que llevan muchos años trabajando en el mercado del turismo sanitario. Es el caso de Grupo Hospitalario Quirón, que hoy en día cuenta con una experiencia en este ámbito que le permite alcanzar una facturación que ronda los de 60 millones de euros y un crecimiento anual del 40%.
Esta veteranía autoriza al grupo a afirmar que la sanidad española en general todavía tiene que destinar muchos esfuerzos para prepararse para lo que se le viene encima. Francisco Rico, director de Clientes Internacional de Grupo Hospitalario Quirón, explica en una entrevista en OndaInversión que, pese a lo que algunas compañías puedan creer, ‘el problema no es convencer a alguien a que venga a operarse, sino saber tratarlo bien a nivel asistencial’.
En este sentido, señala que ‘hay una diversidad cultural que debemos saber tratar’, ‘respetar los tiempos’ o ‘considerar que en postoperatorio pueden haber complicaciones’. Su grupo hospitalario, por ejemplo, dispone de más de 30 traductores ‘que se encargan de evitar las barreras y de intentar hacer lo más confortable posible esta estancia no solo al paciente, sino también a su familia’. Además, contempla que haya una persona de referencia cerca del paciente para cuando este vuelve a su país y una línea de contacto con su médico en España.
Pese a todo, Francisco Rico subraya: ‘Es una certeza que el turismo de salud está creciendo. España se está posicionando ahora como un destino turístico de salud’.
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