José Pedro Marfil, nuevo gerente de la Asociación de Comunicación Política (ACOP) y consultor político ha explicado en prnoticias algunas de las nuevas tendencias en comunicación en el mundo de la política, donde la televisión sigue reinando como el medio estrella, alentado por fenómenos como el de Podemos y las redes sociales.
En 1.960 Richard Nixon y a John F. Kennedy protagonizaron el primer debate político entre dos candidatos a la presidencia de los Estados Unidos en televisión. Desde entonces, durante décadas este formato televisivo apenas cambió. La atención e interés del espectador comenzó a descender de manera proporcional al aumento de la rigidez del formato y la falta de naturalidad de los protagonistas. Durante mucho tiempo las tertulias políticas, a falta de líderes políticos dispuestos a participar en estos espacios sino era por causas electorales, fueron las que suplieron la falta de debates políticos en la pequeña pantalla. Así, escritores, periodistas, y profesionales de cualquier índole se convirtieron en los ‘animales’ televisivos capaces de enganchar a la audiencia con debates encendidos. Precisamente Pablo Iglesias, actual secretario general de Podemos, encontró entre estos tertulianos un espacio ‘idóneo’ para comenzar a lanzar sus mensajes, un lugar que los políticos habían dejado desierto y en el que no se sentían cómodos –a excepción de animales político-televisivos como Pilar Rahola, Celia Villalobos y cuatro contados- .
Para José Pedro Marfil, nuevo gerente de la Asociación de Comunicación Política (ACOP), asegura que la televisión siempre ha sido la reina en la comunicación política. ‘Es verdad que las redes sociales han sido protagonistas en los últimos tiempos; en parte por lo novedoso, por la gran cantidad de opciones que permitía, pero la televisión siempre ha tenido un papel dominante en la comunicación política. De hecho, en la última campaña de Obama, aproximadamente entre el 70 y el 80% del presupuesto se destinó para la compra de espacios publicitarios en televisión’ asegura el consultor experto en comunicación política. Precisamente el uso de los nuevos canales de comunicación y cómo hacen uso de los mismos fue la temática de una de las sesiones dedicadas a la comunicación política celebradas recientemente en de la Universidad Católica San Antonio de Murcia en la que José Pedro Marfil compartió mesa con Fran Rubio, consultor político, y Fran Carrillo, director de La Fábrica de Discursos.
Entre las conclusiones de la mesa en que José Pedro Marfil participó, titulada ‘Las estrategias del poder’ está la creciente preocupación de los políticos en el buen uso de la comunicación. ‘Esto es muy interesante, porque si bien hace un tiempo los políticos no podían comunicar tan bien, últimamente sí que vemos ese interés por comunicar cada vez mejor, cuidar el discurso, o cuidar las formas’, explica el nuevo gerente de ACOP a prnoticias.
Políticos de uno y otro partido han dado el salto a la televisión. Desde que Podemos, capitaneados por Pablo Iglesias, abordase los principales espacios de debate político en La Sexta y Cuatro o la irrupción del nuevo líder socialista, Pedro Sánchez en espacios de televisión tan dispares como el Hormiguero o Sálvame, la televisión se ha convertido en el nuevo hemiciclo de los políticos. Incluso Mariano Rajoy ha dado ‘orden’ a sus ministros de comenzar el ‘ruedo’ televisivo’. Y es que los votos se consiguen el el prime time, y no en los periódicos.
Respecto a si ha sido el ‘efecto Podemos’ el responsable de una mayor presencia de la clase política en la televisión, José Pedro Marfil no les achaca a los de Pablo Iglesias toda la responsabilidad. ‘La adaptación se tenía que producir tarde temprano, porque los últimos cinco o diez años hemos vivido una época con un cambio informativo tremendo, con la aparición de las nuevas tecnologías, la multiplicación de los canales de comunicación, etc. Y tarde o temprano la política y los políticos tenían que entrar en estos canales. Puede que Podemos haya desarrollado un papel de catalizador, pero es una adaptación que tenía que darse tarde o temprano’, opina Marfil.
La televisión se ha convertido en un arma política con un doble filo. No saber cómo desenvolverse en el medio y en los nuevos formatos puede ser la tumba para algún político. Por eso deben tomarse precauciones. ‘El reto es la adaptación’, asegura José Pedro Marfil , gerente de ACOP. ‘ Que el político sepa afrontar con garantías su presencia tanto en medios, en televisión o en cualquier medio. Esa es justamente la clave. Hace un tiempo no había tanto protagonismo en televisión. Y la clave está ahí, en que ha cambiado el formato. Estábamos acostumbrados a una mesa redonda con políticos o tertulianos donde se divagaba y era un formato, quizás, demasiado ‘pesado’. Y a raíz de formatos como ‘59 Segundos’ parece que la política comenzó a interesar. Ahora estamos viendo formatos mucho más dinámicos que prestan mucho más a la aparición, con mucho debate, dinamismo y eso si gusta a la audiencia y está teniendo éxito’.
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