Un proyecto formativo para pediatras incide en la importancia de la nutrición en los 1.000 primeros

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Danone Nutricia Early Life Nutrition ha puesto en marcha el proyecto formativo Iberia Early Life Nutrition College, con el que se pretende llegar a cerca de 1.700 pediatras de la Península Ibérica (1.260 en España y 420 en Portugal) y cuyos contenidos giran en torno a la importancia de la nutrición en los 1.000 primeros días (desde la concepción hasta el segundo año de vida).

 

Distintos estudios científicos han demostrado que lo que comemos en este periodo crítico de los 1.000 días marcará la diferencia en la salud futura del niño, lo que supone una ventana de oportunidad para actuar y obtener beneficios que perdurarán toda la vida.

 

Cada uno de los módulos de los que consta el programa Iberia Early Life Nutrition College contempla un curso previo de formación de formadores a un grupo de 30 pediatras en Utrecht, ciudad holandesa en la que se ubica el centro de investigación Nutricia Research. La figura del pediatra, es clave para fomentar la intervención de los padres en la alimentación y mejora de la salud futura de los niños.

 

El primer módulo, titulado “Asegurando la salud de las generaciones futuras”, ha sido impartido por el doctor José Manuel Moreno, coordinador del Comité de Nutrición de la Asociación Española de Pediatría (AEP), quien apunta que “los 1.000 primeros días constituyen una etapa clave en la que se establecen los patrones de conducta alimentaria que se utilizarán, con pocas modificaciones, a lo largo de su vida”. Este experto es consciente de que “los consejos de vida saludable son los mismos en todas las edades, pero siempre es más fácil aprender buenos hábitos desde el principio”, apunta. “Una buena alimentación en este periodo crítico no solo es garantía de una buena salud durante la infancia, sino que también influye de alguna manera en la programación metabólica del individuo”.

 

Hay muchos hechos científicos que apoyan esta estrategia de mejora de la nutrición en los 1.000 primeros días. “Disponemos de evidencias de estudios en experimentación animal de hace más de 50 años que demuestran los efectos a largo plazo de no seguir la nutrición recomendada durante la gestación y en las primeras etapas de la vida”, explica el doctor Moreno.

 

Más recientemente “se han llevado a cabo investigaciones que muestran influencias sobre la salud futura al elegirse un tipo u otro de alimentación en los primeros meses de vida”.

 

Danone Nutricia Early Life Nutrition llevó a cabo en 2013 el estudio Alsalma 2.0 para conocer la realidad nutricional de los niños españoles de 0 a 3 años. En este sentido, el estudio detectó un exceso en el consumo de proteínas en los niños de 7 meses a 3 años y lo relacionó con el aumento del índice de masa corporal.

 

El experto se atreve con unas breves recomendaciones para cada etapa de los 1.000 días. Así, por ejemplo, para el periodo periconcepcional “es importante que las mujeres cuiden su alimentación y procuren una ganancia de peso adecuada durante el embarazo”, afirma. Por supuesto, “no hay ninguna duda de que la lactancia materna es la mejor opción para cubrir las necesidades del bebé en los seis primeros meses de forma exclusiva”, añade. “La alimentación complementaria debe iniciarse ya en el sexto mes, evitando el exceso de proteínas y de sal”. Por último, “habría que favorecer los buenos hábitos nutricionales de toda la familia, de tal manera que el niño pueda incorporarse a la mesa en su segundo año de vida”. Todo esto debe acompañarse de “actividad física adecuada y poco tiempo frente a las pantallas”, siendo aconsejable la monitorización del crecimiento de forma regular durante este periodo.

 

 

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