Parece que el Gobierno comienza a perder los nervios. El Ejecutivo ve muy cerca las próximas citas electorales y sabe que las encuestas siguen siendo malas para los populares. Además, siguen perdiendo notoriedad frente a las nuevas formaciones. No tanto por un desgastado Podemos y Pablo Iglesias como por el auge de Ciudadanos y Albert Rivera.
Como os contábamos en prnoticias a comienzos de esta semana el enfado de Mariano Rajoy con Mediaset y Paolo Vasile era mayúsculo. Desde el Gobierno se muestran perdidos con la actitud de un Vasile que un día les defiende, otro les ‘traiciona’ y al siguiente encumbra mediáticamente a Albert Rivera dándose mucho peso en sus programas. La incomprensión es mayor teniendo en cuenta el concurso de licencias de TDT que recientemente ha puesto en marcha el Ejecutivo.
Sin embargo, parece que ahora ese enfado de Rajoy ha dejado de ser privado. Y así lo ha manifestado esta mañana públicamente su Ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, en la Sesión de Control al Gobierno en el Congreso.
El titular de Hacienda, que también ha tenido sus más y sus menos a costa de la financiación de RTVE y su negativa a un nuevo rescate, ha puesto en duda la ‘objetividad’ informativa de las cadenas privadas y las ha etiquetado como ‘televisiones amigas’ del PSOE y de su exlíder, José Luis Rodríguez Zapatero. Una ‘relación de cordialidad’ que se fraguó tras la decisión del Ejecutivo de Zapatero de suprimir la publicidad en RTVE en 2010. Como consecuencia de este nuevo modelo de financiación las televisiones privadas asumieron esa parte de la tarta publicitaria.
Pero Montoro no se ha quedado ahí. El Ministro ha asegurado que su única función dentro de RTVE es velar por su buena gestión y ha echado balones fuera respecto a las denuncias de manipulación gubernamental en los medios públicos asegurando que no es su responsabilidad ‘ni decidir, ni opinar sobre los contenidos de TVE’.
Para rematar su intervención el titular de Hacienda ha vuelto a apuntar a Zapatero como culpable de la actual situación y ha defendido su papel como supervisor de una buena gestión de RTVE ‘Ese es el papel que estamos haciendo desde comienzos de la legislatura, en contra de sus pronósticos y en contra de la ruina en que sumieron al organismo público, quitándole la publicidad para dársela a las televisiones amigas, y ahí las tienen, tan encantadas y tan objetivas siempre, a costa del ente público’.
Mensaje de ‘guerra’ a las privadas. ¿Cuánto tardarán Mediaset y Atresmedia en contestarle?
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