La dura crisis económica que ha sacudido el mundo no solo ha destruido negocios y empleos. Esta ‘Gran Recesión’, como ya se la conoce, ha provocado que se evaporen las ilusiones de la sociedad por desarrollarse profesionalmente. Sin embargo, la ausencia de mejores alternativas ha puesto a prueba la creatividad de los más luchadores, de quienes buscan oportunidades constantemente y tienen capacidad de adaptarse al cambio. Con una ‘simple’ idea innovadora y un convencimiento absoluto de su eficiencia para solucionar problemas mundiales, se han lanzado a formar parte de una nueva generación de emprendedores. En el ecosistema del emprendimiento y la innovación, a estas nuevas iniciativas se les denomina ‘start-ups’ y, para muchos expertos, son la solución para procesar la crisis económica.
Tal es el caso de Jordi Boza. Este profesional con más de 20 años de experiencia en la gestión empresarial ejecutiva, desarrollo estratégico de negocios global y de gestión de equipos multidisciplinares en Europa, Estados Unidos y Latinoamérica, sufrió las consecuencias de la crisis y decidió reinventarse. En una entrevista en Digitalmente Saludable, con la colaboración de Sanofi Iberia, explica que las start-ups son ‘a día de hoy, una salida profesional muy seria a tener en cuenta, por lo que deberían recibir más atención y apoyo de las administraciones y clases políticas’.
Precisamente lamenta que estas últimas ‘no están viendo este movimiento con la importancia que realmente se merece’ cuando todos los indicadores coinciden en que ‘es mucho más factible que vuelvan a generarse puestos de trabajo y actividad económica por la unión de muchos pequeños granitos de arena que por movimientos de grandes organizaciones’. Y es que, una start-up dejará de serlo en el momento que logre establecer un modelo de negocio sostenible, rentable y escalable.
En ese contexto, ha organizado para el próximo 27 de septiembre la Barcelona Startup Week, el evento ‘de’ y ‘para’ las start-ups en el que más de 80 gurús de la innovación y CEOs de las principales startups de éxito compartirán sus conocimientos y experiencias. Toda una declaración de intenciones para la clase política. ‘Nuestra ilusión, nuestras ganas de hacer cosas no va a depender de quien gobierne el país. Nosotros tenemos que seguir para adelante’, comenta Boza. Entre los objetivos que se perseguirán durante los siete días que dura el evento, este experto ha destacado uno: ‘fomentar el intercambio de posibilidades y que haya posibilidades de generar negocio para todas las startups’, es decir, ayudarles en su constante búsqueda de soluciones, respuestas, inversores y rondas de financiación.
Las start-ups de búsqueda de negocio en el ámbito de la salud también tendrán aquí un valioso hueco. Jordi Boza comenta que en España ‘existen programas específicos para startups de salud apadrinados por grandes farmacéuticas; y es que, a pesar de ser una actividad empresarial muy regulada, las grandes multinacionales están lanzando proyectos de innovación disruptiva en salud, es decir, apadrinan los proyectos que les propone gente externa a su organización y que prevén que pueden derivar en un buen negocio’.
