No está siendo el año para Adán y Eva. El dating show de Cuatro ha pasado del éxito y la sorpresa que marcaron su primera temporada en antena, a la discreción y el abandono por parte de la audiencia que destaca en la segunda. Dicen que segundas partes nunca fueron buenas y parece que esto se está llevando a la práctica con el formato de Mediaset. A falta de tres programas para finalizar esta temporada, el espacio que presenta Mónica Martínez ha marcado su mínimo histórico, con un bajísimo share de 5,3% y 964.000 espectadores.
No ha sido el año de Adán y Eva que ni tan siquiera ha podido acercarse a los números de su temporada debut, que cerró con una media de 12,8%. Su máximo en esta segunda etapa se ha quedado por debajo del 9% de cuota de pantalla y ha continuado descendiendo hasta tocar fondo con el programa de ayer. Esto complica y mucho las cosas para el dating show de Cuatro de cara a renovar una tercera temporada, que cada programa que se emite, queda más lejos de llegar a ser una realidad.
Su llegada a la televisión fue toda una sorpresa ya que Adán y Eva acabó con los estereotipos y asombró a la audiencia siendo el primer programa que mostraba a sus participantes completamente desnudos. Este reclamo y la elección de unos concursantes que avivaban la polémica fueron ingredientes necesarios para acumular a más de dos millones de personas –de media- en su temporada de debut.
La época dorada del dating show ha pasado y los sueños del paraíso han tornado a pesadilla. De momento, nada se sabe de manera oficial del futuro de Adán y Eva, pero todo apunta a que el próximo 19 de diciembre, será el último episodio de este programa, que supo aprovechar su tirón pero que ahora mismo vive sus horas más bajas.
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