Bertín Osborne ha resucitado mediáticamente gracias al tirón de En la Tuya o en la mía el programa revelación de La 1 en esta temporada. Cada semana Osborne supera sus registros convirtiéndose en el mejor estreno de TVE en muchos años y rozando regularmente los cuatro millones de espectadores. Este éxito también le ha convertido en un reclamo de otros medios lo que le ha llevado a asistir a El Hormiguero, marcando el máximo de la temporada y siendo entrevistado incluso en la Cadena SER, que tradicionalmente no invita a “estrellas de la tele” a sus micrófonos.
Un éxito repentino que ha llevado a Osborne, un cantante, casi retirado, sin ningún éxito en televisión en más de una década y de ideas políticas sumamente cercanas a la derecha más conservadora, a volver al primer plano público. El éxito de Osborne se basa en un formato muy bien realizado por Pablo Carrasco, ex director de programas de TVE, y que encaja perfectamente con la personalidad de Bertín, campechana, socarrona y muchas veces amigo personal de muchos de los personajes que entrevista.
Pero Osborne es más que un presentador de televisión, es un convencido de sus ideas políticas que ha defendido en alguna ocasión tras este renacer televisivo. Hace unas semanas Osborne invitó a su programa a Adolfo Suárez Illana quien le recordó al cantante su pasado a propósito de los recuerdos que el político hizo de su padre el expresidente Adolfo Suárez: “En una noche pasé de ser “Adolfo” en el colegio al “hijo puta” de Suárez por la legalización del Partido Comunista. En esa época había muchos fachas, entre ellos tú, que eras más facha que facha”, le dijo ante la sorpresa de Bertín.
No obstante, esta semana ha estado en Cadena SER con Gemma Nierga hablando de sus futuras entrevistas a Mariano Rajoy y Pedro Sánchez. En el encuentro, tenso por momentos, Bertín indicó que ya han pasado muchos años para olvidar a los fallecidos durante la dictadura de Franco. Preguntado por su pasada entrevista a la nieta del dictador, Carmen Martínez-Bordiú, en la que fue criticado por no preguntarle nada incómodo sobre su abuelo, Osborne ha asegurado que eso pasó hace tiempo y que si él ha podido olvidar también lo pueden hacer otros: “A mí me mataron a 7 tíos carnales en Paracuellos y si me olvido yo, se pueden olvidar los demás”.
Pero ¿cuál es el verdadero pasado de Osborne? Bertín nació en Madrid en el seno de una familia aristocrática española. Hijo mayor y único del VIII conde de Donadío de Casasola estudió en los Jesuítas de Chamartin en el colegio internado San José de Campillos (Málaga) y en el colegio Alfonso XII de San Lorenzo de El Escorial. Cuando tenía dieciséis años abandonó los estudios y se marchó de su casa. Poco tiempo después, hacia 1970, empezó a cantar en discotecas, más por afición que por necesidad. Al mismo tiempo desempeñaba toda clase de oficios: corredor inmobiliario, agente de seguros y representante inmobiliario.
Como cantante graba su primer disco en 1981 con temas como Amor Mediterráneo, Tú, solo Tú, Perdóname, Qué nos pasa esta mañana, Adiós Lucía. En 1983 participa en el Festival de San Remo con el tema Eterna Malattia. Sus últimos trabajos musicales están relacionados con la música ranchera.
En televisión comienza a trabajar en una telenovela en México en la década de los ochenta, para volver a España en 1992 a trabajar en Telecinco presentando Contacto con tacto, un espacio nocturno de citas de parejas. Dos años después ficha por Antena 3 para presentar entre otros programas Lluvia de estrellas y su versión infantil Menudas estrellas, además del programa infantil Esos locos bajitos y el concurso Trato hecho.
Sus últimos años en la televisión estuvieron íntimamente relacionado con cadenas autonómicas cercanas al Partido Popular y recientemente se le pudo ver Intereconomía –con un fracaso de audiencia considerable- y en algún programa de debate político defendiendo sus ideas generando más de alguna polémica.
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