El departamento de Comunicación de Pfizer no se ve afectado por los despidos en la cúpula de la compañía

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Ni Mónica Piñuela ni Ana Luzuriaga ni Ignacio González se han visto implicados en los despidos llevados a cabo ayer mismo por Pfizer España y que han afectado a una treintena de directivos y altos cargos de la multinacional farmacéutica. Según ha publicado en exclusiva Redacción Médica, “el motivo de los despidos ha sido una supuesta infracción del ‘compliance’ o código interno que tiene por objetivo asegurar el cumplimiento de las directrices de la matriz en todas sus filiales”.

El diario digital de información sanitaria no aporta en este artículo los nombres de los directivos afectados, pero desde prnoticias hemos podido confirmar que el equipo de Comunicación de Pfizer España se mantiene intacto. De tal modo, Mónica Piñuela, que forma parte del equipo de Comunicación desde 2003 y que en abril de 2014 fue nombrada jefa de Comunicación de Pfizer España, seguirá coordinando el equipo, dando soporte a todas las unidades de negocio de la compañía y reportando a dirección.

No reportará más a Juan José Polledo. El director de Relaciones Institucionales de la compañía desde 2009 ha sido uno de los puestos de dirección que se han llevado por delante este alud de despidos. También se ha hecho efectivo el despido de Vicente Morales, director de la Unidad Legal y Secretario del Consejo de Administración de Pfizer España y Sur de Europa.

Redacción Médica narra el origen de la decisión de realizar los despidos en Pfizer: “Un alto directivo del laboratorio en España fue despedido hace unos meses por intentar captar voluntades y fomentar el uso del medicamento Enbrel (etanercept), indicado contra la artritis, con argumentos más allá de los estrictamente científicos y al margen del ‘compliance’ de Pfizer España. Dicho directivo llevó el caso a la matriz en Estados Unidos, desde donde se inició una investigación en profundidad”.

A primera hora de ayer, los directivos que supuestamente han estado atentando contra el ‘compliance’ y todos aquellos que, siendo conocedores de que otros compañeros llevaban a cabo estas prácticas, no lo denunciaron, encontraron sus despachos cerrados con llave y todos sus accesos revocados. Fueron invitados a marcharse a través de un escrito. La argumentación legal se ha basado en una serie de datos recopilados entre los que se incluyen conversaciones telefónicas, correos electrónicos y documentación diversa.

Pfizer ha planteado los despidos con respeto a la legalidad vigente; sin embargo, los afectados ya se han reunido para consensuar tanto su postura como las acciones legales a llevar a cabo ante la decisión fulminante de la farmacéutica. ¿Qué pasará ahora? Vienen curvas para el departamento de Comunicación de Pfizer en España.

Seguiremos informando…

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