El departamento de Comunicación y Marketing del Grupo Inditex no previó la crisis de reputación que se le venía encima cuando, hace apenas dos semanas, a través de una petición en change.org, una joven de 17 años denunciaba que los maniquíes que expone la compañía textil para presentar sus prendas a lo largo y ancho del mundo lucían un perjudicial aspecto anoréxico que puede afectar gravemente a la salud mental de los consumidores. Anna Riera pedía entonces dejar de imponer estos estereotipos de belleza.
Hoy, en el Día Internacional de la Lucha contra la Anorexia y la Bulimia, esta iniciativa que partía del inconformismo de una adolescente alarmada por la cantidad de casos de trastornos alimenticios de conocidos y amigos ha alcanzado un impacto de dimensiones tan inimaginables como angustiosas para los responsables de contener la situación. Cerca de 100.000 personas han dejado ya su firma para que la compañía Inditex rectifique y retire las figuras anoréxicas que “promueven un ideal de belleza basado en la extrema delgadez”.
La exigencia de realizar un cambio en los estándares de belleza de sus maniquíes se dirige con especial hincapié a las tiendas Lefties, pero la impulsora de la recogida de firmas aprovecha el caso para hacerlo extensible a las más de 6.300 tiendas que tiene Inditex en 87 mercados. “Cambiar los maniquíes, probablemente, no será un cambio que marque un antes y un después, pero pude ayudar a muchos a darse el reconocimiento que realmente merecen”, comenta Anna Riera.
“¿A cuánta gente le ha pasado alguna vez que ha visto unos vaqueros monísimos puestos en un maniquí anoréxico y luego, al probárselos, se han sentido frustrados con su propio físico?”, pregunta Riera. La creadora de la petición apela a “la necesidad de concienciar a la industria textil del calado que este tipo de acciones tiene en la sociedad y del impacto que genera, corriendo el riesgo de conseguir que ciertos miembros de la sociedad se sientan inferiores y despreciables por no verse reflejados en ese canon”.
El número de apoyos a la iniciativa crece por segundos. Sin embargo, el departamento de Comunicación y Marketing de Inditex mantiene una postura pasiva, discordante con las recomendaciones de la mayoría de los expertos en gestión de crisis: informar cuanto antes y nunca perder el foco en las personas. Inditex aún no se ha manifestado ni a favor ni en contra de las duras acusaciones que ha recibido. Mientras, miles de personas señalan con repulsión al grupo de Amancio Ortega por dar visibilidad a dañinos estereotipos impuestos por los antojos de la moda, por banalizar un problema gravísimo y por no enmendar el error de poner en riesgo la salud pública.
Esta petición no es la única registrada en Change.org que denuncia el fomento a la anorexia y la bulimia. En abril de 2014, Lidia Amelia, una madre preocupada por las páginas web que ofrecen a su público consejos para perder peso mediante prácticas extremas, inició una petición en la que pedía al Ministerio de Justicia y a los líderes de los partidos mayoritarios el cierre de estas páginas o el bloqueo de sus contenidos para poner freno a esta problemática. La petición registró más de 260.000 firmas.
Estos casos han provocado que se reabra una y otra vez el debate sobre la necesidad de censurar ciertas estrategias de marketing que fomentan los trastornos alimentarios y la importancia de contemplar penas contra aquellas personas o compañías que hagan apología de la anorexia y la bulimia, ya sea a través de soporte offline como online. “Igual que se recoge como delito la difusión de contenidos racistas o xenófobos, o el enaltecimiento del terrorismo también es necesario legislar en estas conductas contrarias a la salud”, comenta Edurne Larrarte presidenta de la asociación aragonesa de familiares de enfermos de anorexia y bulimia.
Y es que, el repunte de estas enfermedades se debe, entre otros factores, a la presión estética, los cánones de belleza, el mundo de la moda, la publicidad y la comunicación. En este sentido, los expertos advierten que los enfermos se están nutriendo de forma preocupante de Internet. El entorno online ayuda a difundir los mensajes que asocian el éxito en la vida con el culto a la delgadez y a la belleza, y permite la creación de páginas web que recogen desde consejos para seguir una rigurosa dieta o fomentar el ayuno hasta consejos para autolesionarse de forma efectiva o incluso manuales con maneras de suicidarse. En concreto, Según datos de la Agencia de Calidad de Internet (IQUA) el número de páginas web de este tipo aumentaron entre los años 2006-2011 en un 470%, siendo el 75% de los usuarios menores de edad.
Todo esto supone un punto de inflexión para frenar estas malas prácticas. ¿Contribuirá Inditex a erradicarlas?
Seguiremos informando…
