Uno de los dramaturgos y directores más prolíficos del panorama español visita Destino Wonderland para presentarnos su estreno más reciente, Amén, una obra que supone un recorrido histórico por el modo en que se ha condenado, perseguido, prohibido e ilegalizado la homosexualidad. Desde el asesinato de Federico García Lorca hasta los últimos casos de pederastia en el seno de la Iglesia Católica que se van conociendo, la obra de Carlos Be parte de datos históricos, de informaciones contrastadas, de testimonios reales, de anuncios aparecidos en prensa en los que se invitaba a participar en una manifestación para oponerse a la aprobación de la ley que sanciona el matrimonio igualitario, conformando un collage que estremece al espectador.
Escrita hace varios años, Carlos Be tan sólo ha incorporado nuevos datos, realidades de ahora mismo. Por desgracia, anuncia que Amén, tal y como puede verse en el Café del Kosako en Madrid todos los domingos y lunes de febrero, no ha perdido vigencia ni capacidad de denuncia. Sigue siendo necesaria, apenas ha necesitado retoques para ser estrenada. Dos jóvenes actores, Carlos López y Jorge Yumar, demuestran su ductilidad, sus facultades, su pleno dominio de la escena al transformarse en diferentes personajes en apenas un segundo. Todo frente a los ojos del público, integrado en la historia gracias a su talento y a la cercanía que propicia el Café del Kosako. Con Amén, Carlos Be da voz a las víctimas, a los que ya no pueden defenderse, a los que se reprimió, a los que se ocultó, saca a la luz la impunidad con que sacerdotes han delinquido y cometido lo que ellos mismos persiguen y consideran pecado mientras que la Iglesia Católica miraba hacia otro lado y no los expulsaba de su seno. Una vez terminen las representaciones en Madrid (por el momento, puesto que piensan regresar), Amén iniciará una gira que comenzará en Vitoria en marzo y de cuyos pasos irán informando puntualmente en su página web.
Pablo Vilaboy nos trae una película musical que, aunque pueda sorprender a muchos es, desde el mismo momento de su estreno, todo un icono lésbico: Doris Day en el Oeste. Inspirado en la figura real de Calamity Jean (llamada en España Juanita Calamidad), el filme proporcionó a la popular actriz uno de sus grandes éxitos, al margen de hitos que pasaron a formar parte de su repertorio más recordado como Black Hills of Dakota y, sobre todo, Secret Love, la canción que fue escogida como seña de identidad por las lesbianas de la época, simbología que no ha perdido hoy en día.
Seguiremos Informando…