SAP SE ha anunciado hoy que es la primera multinacional de tecnología en recibir el certificado mundial EDGE (Beneficios Económicos de la Igualdad de Género, por sus siglas en inglés), que reconoce su compromiso y acciones globales para lograr y mantener la igualdad y la diversidad de género en el lugar de trabajo. La Certificación EDGE es la metodología y el estándar principal para evaluar el compromiso corporativo con la igualdad de género. Lanzado en el Foro Económico Mundial, la metodología de evaluación EDGE se distingue por su rigor e impacto en el negocio.
El proceso de certificación mundial de SAP empezó en marzo de 2016, después de haber logrado convertirse, a principios de año, en la primera compañía tecnológica en obtener la Certificación EDGE en Estados Unidos. La certificación global, que requiere la inclusión del 80% de los países de una organización, fue recibida tras la revisión, por parte de terceros, de los datos de la compañía, las prácticas de género y las políticas de empleo, así como de los resultados de las encuestas hechas a empleados en 12 países: Alemania, Australia, Brasil, Canadá, China, Francia, India, Irlanda, Japón, Reino Unido, República Checa y Singapur. Los parámetros examinados en la revisión incluyen selección de personal y promoción, capacitación para el desarrollo de liderazgo, mentoring, jornada flexible y cultura corporativa.
“SAP debe estar a la vanguardia de la lucha por eliminar los prejuicios en las empresas”, ha declarado Bill McDermott, CEO de SAP. “Esta certificación global marca un hito importante en nuestro continuo esfuerzo por eliminar los prejuicios en el lugar de trabajo. Estamos muy orgullosos de la inversión que hemos realizado en programas y tecnologías para impulsar la inclusión. Esta certificación representa un paso adelante en nuestro liderazgo en esta cuestión crítica, y todo ello está dirigido a ayudar a que el mundo funcione mejor y a mejorar la vida de las personas”.
SAP tiene un compromiso, adquirido por la Junta Directiva, para que un 25% de los puestos de liderazgo estén ocupados por mujeres a finales de 2017. Este compromiso ha sido reforzado con medidas. En el segundo trimestre de 2016, las mujeres ocupaban el 24,1% de los puestos de liderazgo de la compañía y representaban el 32,5% de la plantilla.
Las acciones de SAP para lograr la igualdad de género van más allá de las cuotas. El mes pasado, SAP desarrolló un análisis de la equidad en la remuneración de sus empleados en Estados Unidos y puso en marcha de forma proactiva una iniciativa para el aumento de la compensación de los empleados que carecían de paridad salarial. Además, SAP ha anunciado una herramienta de machine-learning que, entre otras capacidades, detecta prejuicios en los puestos de trabajo.
“La igualdad de género no es una iniciativa de responsabilidad social corporativa o un simple beneficio cultural”, ha apuntado Stefan Ries, director de Recursos Humanos de SAP. “Es un diferenciador estratégico, una fuente de innovación y un motor de ingresos para nuestra compañía. Estamos orgullosos del reconocimiento que hemos alcanzado, pero mantenemos nuestro compromiso de crear una cultura donde los empleados de todas las procedencias puedan prosperar. Queremos ser el modelo a seguir de la industria tecnológica en cuanto a las oportunidades para las mujeres, así como para todas las minorías, y mantenemos la esperanza de que otras compañías de nuestro mercado sigan nuestro ejemplo”.
“La industria tecnológica es el seno de innovadores en todo el mundo y por eso, la diversidad tiene una importancia especial en ella. Mientras que la comunidad tecnológica global ha obtenido tradicionalmente unas puntuaciones bajas en igualdad de género, SAP se ha erigido como líder de las compañías de su sector en todo el mundo, no solo por su fuerte compromiso público, sino por el impacto de los programas y el esfuerzo que está realizando en el día a día”, ha manifestado Aniela Unguresan, co-fundadora de EDGE Certified Foundation. “Con esta Certificación EDGE global, SAP sigue estableciendo el estándar para la igualdad de género en tecnología. Aplaudimos su esfuerzo para promover una fuerza laboral que facilite una cultura de diversidad, inclusión e igualdad”.