La última semana de septiembre nacía finalmente El Independiente de Casimiro García Abadillo. El periódico nacía con una apuesta por la información política y económica, muy arropado por las grandes empresas del Ibex 35 y con la intención de mantener el control del diario en manos de sus fundadores. Hasta el momento, sus ingresos han sido solo por publicidad, pero esta semana han comenzado a promocionar un sistema de pago de contenidos complementario.
El modelo responde a la lógica de muro permeable, en el que se mantienen las grandes noticias y la mayoría de las informaciones en abierto, pero se abre el diario a suscriptores los que tienen acceso a nuevos contenidos exclusivos y premium. Es un modelo de negocio muy similar al instaurado por Pedro J. Ramírez en el lanzamiento de El Español, un sistema que de momento es solo complementario al total de los ingresos. El Independiente llama a sus futuros suscriptores (el sistema comenzará a rodar a partir del 15 de septiembre) lector de “banda dorada”, en referencia al distintivo que tendrán todos los contenidos a los que podrán acceder.
Es un nuevo paso en el modelo de pago por contenidos
Esta edición especial para suscriptores incluirá los contenidos en abierto del diario ocho horas antes que el acceso en abierto, se podrá leer El Independiente con o sin publicidad, se recibirán análisis bursátiles en exclusiva, un boletín con resumen de noticias, acceso a los foros de debate que organice el diario y tres podcast semanales realizados por los especialistas del diario. La suscripción mensual es de seis euros y la anual es de 60 euros, aunque luego del fin de la oferta debería subir a 72 euros.
El Independiente explora da el paso hacia un modelo de pago por contenidos complementario, que en el caso de la prensa tradicional solo está explorando Vocento con El Correo y El Diario Vasco y La Nueva España. El Mundo, en tanto, intentó poner en marcha un muro de pago que se hizo permeable a los pocos meses. En el ámbito digital los diarios se han decantado más por el mecenazgo y por la suscripción total como en el caso de Infolibre, al que solo tienen acceso sus suscriptores; o eldiario.es que es en abierto, pero funciona con la financiación de sus socios. El Español nació abriendo parte de su capital a sus lectores y un año después de su lanzamiento mantiene suscriptores que al igual que El Independiente, con acceso a contenidos premium a cambio de su cuota mensual.
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