{wbamp-hide start}
El cantautor Luis Ramiro, sin dejar de lado su faceta musical, ha ido desarrollando en los últimos tiempos una trayectoria paralela combinada como poeta, de hecho ha sido considerado uno de los precursores de la llamada nueva poesía que tiene en Marwan o Diego Ojeda alguno de sus exponentes más exitosos. Fue precisamente el primero quien animó a Ramiro a dar a conocer los poemas que llevaba tiempo componiendo pero que en cambio guardaba celosamente. Según reconoció el propio Ramiro, “tanto me insistió que no pude negarme”, y así fueron apareciendo varios libros que han superado los 30.000 ejemplares en lo que a ventas se refiere.
“Poemas para infancias mal curadas” es el título que recientemente publicó la editorial Aguilar dentro la colección Verso y Cuento, volumen en el que aparecen composiciones ya publicadas junto a otras inéditas y también la letra de algunas de sus canciones. Luis Ramiro visitó “Destino: Wonderland” para hablar de esta obra y se ofreció gustoso a recitar algunos poemas y regalar a los oyentes aquello que le ha hecho popular y acreedor de seguidores muy fieles: su voz.
Luis Ramiro fue candidato a un Grammy Latino por “Dramas y caballeros”, uno de sus trabajos discográficos, y siempre le había gustado salpicar sus actuaciones con algunos poemas, creaciones que le nacían de ese modo porque le brotaban cuando no tenía la guitarra entre las manos (“No hay confusión posible: lo que nace como canción nace de ese modo y lo mismo puede decirse de los poemas”). Ahora, aunque hay palabras que le suenan un tanto inmerecidas o aún no ganadas del todo (se sonroja cuando se le recuerda que hay quien le ha considerado el nuevo Joaquín Sabina), ya no es poeta a solas, a rachas o para pocos, incluso puede presumir de que hay seguidores que le han conocido directamente por los poemarios y no por sus canciones.
A menos de un mes de comenzar las celebraciones del World Pride 2017, Luis Ramiro pone su grano de arena en la reivindicación del respeto y hace un llamamiento a la convivencia, a desterrar prejuicios, a no establecer jerarquías, a que cada cual pueda amar a quien desee sin tener que ocultarse ni disimular (y mucho menos por miedo a ser vejado, golpeado, multado e incluso asesinado), recita con vehemencia “Dos mujeres” y exige “llamarlas por su nombre, no lesbianas: son sólo dos mujeres sobre el suelo que pintan con su vuelo la mañana”.
Seguiremos informando…