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El Pavón Teatro Kamikaze acoge hasta el próximo 18 de junio el debut de Ismael Serrano como director teatral, tarea que comparte con Jimena Ruiz Echazú. “Oliverio y la tormenta” es también el primer espectáculo musical que Ismael compone y, completando el triple salto mortal, es una función que se dirige a toda la familia y en especial a los niños a partir de 2 años.
Ismael Serrano se embarcó en esta aventura buscando un vehículo con el que transmitir a su hija el amor por las artes escénicas, evocando el espíritu y la trascendencia de autoras plenamente dedicadas al público infantil, como Gloria Fuertes o María Elena Walsh, que supieron reunir en composiciones aparentemente sencillas códigos muy diferentes según la edad del receptor, “por eso permanecen con nosotros y las seguimos descubriendo como adultos”, afirma Ismael, quien también reivindica la herencia de programas de televisión como “El planeta imaginario” que, con la diversión como bandera, ayudaban a descubrir libros, personajes históricos, músicas y “proporcionaban conocimiento con enorme facilidad y efectividad”.
“Oliverio y la tormenta” cuenta la historia del personaje homónimo, un ratón robacalcetines (al que pone voz Estrella Olariaga) que vive una noche muy inquietante porque se ha ido la luz y llueve. Su amiga Emma, interpretada por Jimena Ruiz Echazú, le descubrirá cómo la imaginación puede rescatarnos del miedo y la inacción. Ismael Serrano anuncia luciérnagas, xilófonos, campanas, el ukelele de Emma, cuentos, canciones, todo lo necesario para pensar sólo en jugar y olvidar aquello que nos asusta.
Coincidiendo con el estreno de “Oliverio y la tormenta”, Ismael Serrano acaba de publicar “5 canciones para dormir y 1 para despertar”, CD que recoge todos los temas que se interpretan en la función, con el añadido de composiciones de Silvio Rodríguez, Joan Manuel Serrat o Luis Antonio Spinetta, “todas ellas son nanas en las que, tal vez, no se ha reparado como tales”.
Tras su breve paso por el Pavón Teatro Kamikaze, “Oliverio y la tormenta” cruzará el Atlántico para hacer temporada de invierno en Buenos Aires con el ánimo y la intención de regresar a España con la función más rodada y consolidada. Ismael Serrano se enfrenta con gran humildad y enormes cariño y respeto por lo que hace (“y por el público, sobre todo el infantil, el más sincero, el más exigente”) a sus nuevos cometidos como artista, con ganas de poder seguir explorando y desarrollando estas facetas en las que ahora debuta.
Seguiremos informando…