Alectinib se ha confirmado como una opción de tratamiento en primera línea para los pacientes con cáncer de pulmón ALK positivo después de haber demostrado eficacia en pacientes previamente tratados con crizotinib.
Los resultados del estudio fase III ALEX, presentados hoy en la 53 reunión anual de la Sociedad Americana de Oncología Clínica (ASCO, Chicago 2-6 de junio), muestran que Alectinib redujo en más de la mitad (53%) el riesgo de progresión o muerte (supervivencia libre de progresión, SLP) frente a crizotinib cuando se administra como tratamiento en primera línea en pacientes con cáncer de pulmón no microcítico (CPNM) con traslocación en el gen ALK (quinasa del linfoma anaplásico; ALK positivo) (hazard ratio (HR)=0.47, 95% CI: 0.34-0.65, p<0.0001).
En el momento de la evaluación, aún no se había podido alcanzar la mediana de SLP evaluada por los investigadores (objetivo primario del estudio) del grupo tratado con Alectinib (95% CI: 17,7-no alcanzada) frente a los 11,1 meses (95% CI: 9,1-13,1 meses) en el grupo tratado con crizotinib. La mediana de SLP determinada por un comité de revisión independiente, objetivo secundario, fue de 25,7 meses (95% CI: 19,9-no alcanzada) entre los que recibieron Alectinib frente a los 10,4 meses (95% CI: 7,7-14,6 meses) que consigue crizotinib (HR=0.50, 95% CI 0.36–0.70; p<0.0001). El perfil de seguridad de Alectinib fue favorable y consistente con los estudios previos.
Según ha señalado Sandra Horning, Chief Medical Officer y máxima responsable de Desarrollo Internacional de Roche, “Alectinib redujo el riesgo de progresión de la enfermedad en más de la mitad y también las posibilidades de que el tumor creciera o se diseminara en el cerebro. Cuando esto sucede, los efectos pueden ser devastadores para los pacientes. Estos resultados mejoran de forma significativa los resultados que obtiene el estándar gracias a su capacidad para ampliar el tiempo medio que los pacientes viven sin que la enfermedad empeore, pasando de menos de un año a más de dos. Presentaremos estos datos a todas las autoridades regulatorias”.
Según el doctor Luis Paz Ares, jefe del Servicio de Oncología del Hospital 12 de Octubre de Madrid, “con los estudios que han comparado directamente el estándar con un fármaco de nueva generación como Alectinib hemos podido confirmar su superioridad tanto en primera como en segunda línea. Ahora para el paciente lo realmente importante es la secuencia en que vamos a ir dando los medicamentos disponibles. Teniendo en cuenta los resultados obtenidos con Alectinib como opción inicial, será difícil que lo dejemos para la segunda línea, particularmente en aquellos pacientes con alto riesgo de enfermedad cerebral”.
Es importante que la mediana de progresión pase de ser unos 11 meses con crizotinib a casi 26 con Alectinib. A esto hay que sumar otro hallazgo destacable en relación a las metástasis cerebrales, tan habituales en estos pacientes: comprobamos que tanto los que al inicio ya presentaban presencia de la enfermedad en el cerebro como los que no la tenían se beneficiaron mucho más si recibían tratamiento con Alectinib que con Crizotinib. Es decir, unos experimentaron menor progresión y otros conseguían evitar la aparición de la metástasis cerebral. Además todas estas ventajas se han logrado con un buen perfil de seguridad”.
El estudio fase III ALEX, internacional y randomizado, también demostró que Alectinib redujo el riesgo de que la enfermedad progresara en el sistema nervioso central (SNC) en un 84% (HR=0.16, 95% CI: 0.10-0.28; p0.0001). La tasa acumulada de 12 meses de progresión en el SNC para pacientes con o sin metástasis iniciales en SNC fue del 9,4% (95% CI: 5,4-14,7%) entre los pacientes tratados con Alectinib, porcentaje que ascndió a un 41,4% (95% CI: 33,2-49,4%) en el grupo que recibió Crizotinib.
Para el doctor Javier de Castro, jefe de Sección de Oncología del Hospital La Paz de Madrid, una de las ventajas que aporta Alectinib es su alta actividad frente a una complicación tan frecuente en estos pacientes como es la progresión al Sistema Nervioso Central. “Hasta ahora sabíamos que aproximadamente un 50% de los pacientes ALK positivo va a desarrollar afectación metastásica en el sistema nervioso central: casi un 20% al principio de la enfermedad y más de un 50% a lo largo del proceso. Ahora ya sabemos que Alectinib ha demostrado que es eficaz a la hora de reducir la afectación cerebral tanto en pacientes previamente tratados como en los que reciben tratamiento por primera vez con este fármaco”.
“Ahora”, explica el doctor De Castro, “Alectinib ha demostrado reducir la afectación a ese nivel tanto en pacientes que habían sido sometidos a radiación como en los que no la habían recibido. El efecto preventivo del fármaco sobre las metástasis cerebrales puede significar un cambio en la historia natural de la enfermedad. Este hecho es muy importante, ya que la afectación cerebral empeora la calidad de vida y la supervivencia de los pacientes de forma significativa”.
Por todo ello, añade este experto, resulta fundamentalmente importante generalizar todo lo posible el uso del test que permite saber si un paciente con cáncer de pulmón es ALK positivo. “Igual que hemos conseguido que el 90% de los pacientes se someta a la prueba que determina si tiene una mutación EGFR para poder darle el tratamiento adecuado, sería bueno lograr lo mismo para el test ALK, cuya implementación no llega al 60%. Es importante concienciar que la identificación de pacientes ALK es tan necesaria como la de los pacientes con mutación EGFR”.
La presentación oficial de los datos del estudio ALEX tendrá lugar hoy a las 12:09-12:21 CDT en la Reunión anual de la Sociedad Americana de Oncología Clínica (ASCO). El estudio se publicará de forma simultánea en el New England Journal of Medicine y formará parte del programa oficial de prensa de ASCO el lunes 5 de junio a las 08:00 CDT.
Los datos del estudio ALEX serán presentados a las autoridades sanitarias, incluyendo la Food and Drug Administration (FDA), que el pasado mes de septiembre reconoció a Alectinib como terapia innovadora (Breakthrough Therapy) para el tratamiento de pacientes con CPNM ALK positivo que no han sido tratados previamente con un inhibidor de ALK.
Tiene autorizado su uso en monoterapia en Europa, Estados Unidos y otros diez países para pacientes con CPNM ALK positivo que han progresado tras recibir crizotinib o que no toleren este fármaco. Alectinib está también aprobado en Japón para pacientes cuya enfermedad está en fase avanzada, recurrente o ya no es candidato a una cirugía que extirpe el tumor completamente.
En Europa, Alectinib recibió la autorización condicional el pasado mes de febrero como monoterapia para pacientes con CPNM ALK positivo previamente tratados con Crizotinib3. El estudio ALEX también ha analizado el perfil de seguridad post-autorización y así cumplir con los requisitos establecidos por las autoridades europeas para convertir la aprobación condicional de esta indicación en definitiva para Alectinib como tratamiento de inicio en fase avanzada.