Pedro García Cuartango ha roto su silencio por primera vez tras su fulminante destitución como director de El Mundo a finales de mayo y su posterior desvinculación de la principal cabecera de Unidad Editorial tras más de 26 años de trayectoria profesional en el diario. Cuartango ha concedido una entrevista a El Español donde ha hablado claro acerca de su salida de El Mundo y de otros temas de actualidad dentro del sector.
Preguntado por los motivos de su destitución Pedro García Cuartango ha apuntado que “todavía no sé exactamente las razones”. El periodista destaca que las ventas se habían estabilizado y que el periódico iba bien, por lo que apunta que “interpreto que la empresa perdió la confianza en mí y por eso me destituyeron”. Respecto a su cargo como director interino Cuartango ha afirmado conocer desde el principio los ‘riesgos’ que podría entrañar ese contrato de interinidad, aunque ha resaltado que ha ejercido como director al uso a lo largo de los 370 días que ha permanecido al frente de El Mundo.
Por otro lado Pedro García Cuartango ha sido rotundo explicando que “yo he sido un periodista incómodo, un periodista no manejable. He preferido defender mi independencia como director a mi continuidad y eso tiene un precio: y yo lo he pagado. Pero si volviera a ser director haría lo mismo”. A pesar de ello, a Cuartango “no le consta” que presiones políticas, empresariales o sociales puedan estar detrás de su salida del diario de Unidad Editorial. El exdirector de El Mundo también confiesa que decidió no seguir vinculado a la cabecera porque “pensé que era mejor romper relaciones e iniciar una nueva etapa profesional”. Un nuevo ciclo que aún no tiene destino concreto, pero que siempre estará relacionado con el periodismo, ha afirmado en su entrevista en El Español.
Cuartango no ha dudado en asegurar que Pedro J. Ramírez ha sido el mejor director de El Mundo de todos los que han pasado por el cargo. En otro orden de cosas Pedro García Cuartango se ha mostrado en contra del duopolio que ostentan Atresmedia y Mediaset y lo ha considerado como una ‘anomalía’ dentro de Europa. Cuestionado por los famosos SMS de Bárcenas a Mariano Rajoy, el periodista ha revelado que “nosotros éramos muy conscientes de la trascendencia de esa información, pero yo estaba convencido de que Rajoy no iba a dimitir; y se lo pedimos en un editorial”. Algo que finalmente nunca se produjo a pesar del bombazo informativo que supuso la publicación de esa noticia en El Mundo.
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