Los digitales cambian el mapa de comunicación catalán

Los digitales cambian el mapa de comunicación catalán
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La emergencia de ‘El Nacional’ y de ‘Cronica Global’ aparca la antigua influencia de ‘La Vanguardia’ y ‘El Periódico’.

Hubo tiempos en la comunicación catalana en la que todo pasaba por dos cabeceras. Una, con un siglo de historia en manos de la familia Godó, consiguió superar todo tipo de obstáculos políticos y mantener el negocio de La Vanguardia a flote. Otra, nacida tras el franquismo, también tenía personalidad de empresa familiar bajo el liderazgo de su creador Antonio Asensio, inventor de Interviú y de El Periódico de Cataluña bajo el paraguas del Grupo Zeta.

Hoy ni La Vanguardia prescribe con la misma intensidad ni El Periódico es el diario de todos los bares de Barcelona y su área metropolitana. Los medios digitales han reocupado un importante espacio antiguamente reservado a las dos cabeceras históricas e influyen notablemente menos en las audiencias. Las disputas de las empresas por comunicar sus buenas noticias en esas plataformas ya no son tales y la segmentación de lectores con capacidad de prescripción se halla en otros ámbitos.

En paralelo, profesionales venidos de esas dos grandes casas, son los impulsores de los nuevos líderes digitales. Por un lado, José Antich, periodista y director de La Vanguardia hasta su destitución y sustitución por el actual Màrius Carol. Antich, que históricamente era un aliado de Unió y del Partido Popular, viró en la última etapa al frente del periódico de los Godó hacia posiciones soberanistas. Hoy es el editor y primer accionista de El Nacional, un digital de posiciones independentistas que cuenta con el respaldo económico del gobierno de la Generalitat y que ha absorbido la audiencia ideológicamente secesionista.

A su lado, Crónica Global, un digital impulsado por dos periodistas venidos de El Periódico de Cataluña, se sitúa también a la cabeza de las audiencias catalanas. En este caso, el medio que dirige Xavier Salvador (que es su primer accionista y antes impulsó entre 2010 y 2015 los años exitosos de Economía Digital) es inequívocamente constitucionalista y el único de los existentes en Barcelona que soporta la unidad española como principal bandera editorial. Su director adjunto, Joaquín Romero, también llegado desde el Grupo Zeta, es al igual que el director un especialista en información económica, especialidad en la que ha desarrollado su ya larga dilatada carrera profesional.

Ambos medios han sumado cada uno 2,2 millones de lectores únicos en julio pasado, según los datos de OJD. En el caso de Crónica Global se da la circunstancia de que es, además, el socio catalán de Pedro J. Ramírez y El Español, aunque ambos medios mantienen su independencia editorial y colaboran con los contenidos que desean compartir de manera conjunta. La alianza entre estos dos digitales es la primera operación de consolidación del mapa mediático español que ha tenido lugar en 2016 y que se espera abra paso a otras de similar perfil ante un mercado publicitario muy exprimido por la proliferación de medios.

El cambio, pues, de las diferentes polaridades informativas catalanas, está servido. Mientras La Vanguardia y El Periódico han coqueteado con el soberanismo han perdido audiencia de manera sistemática, aunque a decir de los periodistas y directores de comunicación catalanes eso les ha permitido equilibrar sus cuentas de resultados gracias a las ayudas en forma de subvenciones y de publicidad institucional que reciben de las principales administraciones, la autonómica y la local de Barcelona.

La mirada ahora está puesta en lo que sucederá en Cataluña en octubre (o antes) y cuál de los dos digitales estará en mejor posición para afrontar lo que ya se conoce entre los políticos de aquella comunidad como el postprocés.

Seguiremos informando…

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