¡Qué duda cabe! Las apps han cambiado nuestras vidas, dándole una vuelta a las comunicaciones tradicionales y trayendo consigo una gran revolución en la que nuestro smartphone ejerce de portal de entretenimiento, de tutor gastronómico, de hombre del tiempo y hasta de asesor de imagen. Son muchas las apps que han desgastado a base de horas nuestro dedo pulgar.
Algunas nos acompañan desde su nacimiento tornándose en aliadas de cada día, otras van y vienen, y un puñado de ellas nos roban nuestros datos durante un tiempo para después caer en el olvido más absoluto. Neffos, la marca de smartphones de TP-Link, ha recopilado las 7 aplicaciones más populares de las que seguro has disfrutado, pero de las que ya no te acordabas, ¿o sí?
- Dubmash: Puesta de moda hace ya algunos años por rostros conocidos de nuestro país, esta app te daba la opción de convertirte por unos segundos en Esperanza Aguirre, Carmen de Mairena o el mismísimo Darth Vader; personajes a los que podías doblar las voces. Puro entretenimiento, la aplicación comenzó a caer en desuso; ahora su equivalente parecen ser los filtros de Snapchat o Instagram, porque la cuestión sigue siendo divertirse transformando nuestra voz… o nuestras caras.
- Viber: En algún momento se postuló como una alternativa real, la mejor quizá, a Whatsapp. Nacida en España, fue una de las primeras aplicaciones con la capacidad de ofrecer llamadas gratis. Viber empezó a almacenar usuarios de una forma vertiginosa, y a la misma velocidad se fue desangrando. En su contra también figuran las denuncias de algunos medios debido al poco respeto del derecho a la privacidad de sus usuarios, ya que la app almacena la información sobre los contactos de cada usuario. Aun así, hoy en día, según su CEO, la compañía sigue acumulando más de 200 millones de usuarios.
- Triviados: Basada en el clásico juego de mesa Trivial, esta app se convirtió durante algunos meses en toda una institución de los juegos para smartphone. Como pasaba con el clásico, la app tenía una serie de preguntas finitas, con poca rotación y, llegado un punto, no ganaba el más listo, sino el que más partidas había jugado aprendiéndose cada respuesta. Este fue uno de los motivos por los que esta entretenida app, instigadora de piques interminables, fue perdiendo gancho entre sus usuarios.
- Ares: El archiconocido programa para la descarga de música también tuvo su relevancia en el mundo app. Con la ayuda de sus usuarios, Ares posibilitaba el acceso a música, series, películas… ¿El problema? Que en ocasiones querías escuchar el último disco de Daft Punk y acababas limpiando la cocina con lo nuevo de Pitingo. Luego llegaron Spotify y Netflix para acabar de enterrar el cadáver.
- Pokémon GO: Sin duda, uno de los fenómenos virales más poderosos de la última década. Pokémon GO fue mucho más que un simple juego; se convirtió casi en una realidad paralela, en la que algunos vivían más que en la pura realidad. Poco a poco la app de Pikachu, Charmander y compañía fue quedando en el olvido, lastrada por la captura de la totalidad de los pokémon, y es que una vez acabado el juego finalizaba la diversión y, por ende, la rentabilidad de la app.
- BlackBerry Messenger: Una auténtica pionera. Una aplicación indispensable hasta que Whatsapp se cruzó en su camino. El chat de BlackBerry cambió la forma en la que nos comunicábamos, brindándonos la oportunidad de dejar de contar caracteres en los SMS y abriendo un nuevo abanico de posibilidades. Supuso el inicio de una nueva era en la que los mensajes cortos comenzaron a imponerse a la voz.
- Foursquare: Hablando de pioneros, Foursquare, esa aplicación check-in que tenía el poder de nombrarte alcalde de tu calle preferida gracias a sus medallas nos convirtió en adictos a sus recompensas virtuales. Esta app nos descubrió una forma de interactuar con nuestros amigos a través del juego, sin embargo, tuvieron que cambiar su modelo de negocio por falta de rentabilidad. Si alguno la echa de menos, puede descargarse Swarm, la actualización de esta vieja gloria que incluye muchas novedades.